¡Se acabó! Mezcla de emociones en el estadio José Zorrilla. Desahogo para los rojiblancos, que no tienen que sufrir más para levantar el título de liga. Mucho sufrimiento que ha acabado mereciendo la pena, con grandes remontadas épicas. Los de Simeone ganan su undécima liga en la última jornada, con el Real Madrid acechando y esperando un pinchazo de última hora.
En la otra cara de la moneda, el Real Valladolid confirma su previsible descenso en una jornada en la que tenían que darse muchas casualidades, de las cuales no se ha cumplido ninguna, para lograr salvarse. Por fin se termina una temporada de pesadilla para los blanquivioletas, que bajan tras tres años en Primera.
El partido comenzó disputado, con ambos equipos jugándoselo todo. Pese a los primeros acercamientos visitantes, sería el Real Valladolid el que sorprendería. Un contraataque perfectamente ejecutado, combinando Weissman, Toni Villa, Marcos André y Óscar Plano, dejaba a este último solo delante de Oblak, para que definiese a la perfección y adelantase a los suyos en el marcador en el minuto 18. Estos primeros minutos daban alas a la imaginación de los pucelanos y madridistas para ver posibles sus objetivos.
Tuvo que llegar la segunda parte para que el Atlético de Madrid se pusiera las pilas. Y fue en el minuto 57 cuando Correa hizo un gran zigzag regateando rivales para poner un punterazo raso desde fuera del área pegado al palo, donde Masip no pudo llegar. 1-1 a falta de más de media hora, y el empate no le valía a ninguno de los dos equipos.
Poco después, pudo marcar el segundo el Pucela. Un disparo lejano de Olaza acababa rechazado por Oblak a la cabeza de Weissman, que remató como pudo sin llegar a encontrar portería. El gol del desempate llegó en el minuto 67, con un pase de Sergi Guardiola que acabó en asistencia a Luis Suárez, al que dejó campo libre para plantarse en frente de Masip y definir, poniendo el que sería el definitivo 1-2.
Con este resultado, se cerraba la temporada para ambos equipos, con sensaciones muy dispares. La lucha por el título la gana el Atleti y la lucha por la permanencia se la lleva el Elche, condenando al Real Valladolid y al Huesca al pozo, de donde intentarán salir lo antes posible.
