Una vez finalizada la liga, los equipos se aproximan a fichar a los mejores jugadores o a los que más han destacado en esta temporada.

En el caso del Getafe, el jugador que más pasiones está levantando es el charrúa Mauro Arambarri. 

Esto no es de extrañar, ya que en sus cuatro temporadas en el Getafe el centrocampista azulón ha demostrado de lo que está hecho.

Tal ha sido su papel en el conjunto madrileño, que equipos como el Manchester United o el Nápoles fueron los primeros en demostrar su interés por él y apuntarlo en su lista de objetivos, pero aun así todavía no ha llegado ninguna oferta oficial por Arambarri.

Sin embargo, también interesa entre los equipos españoles como son el Atlético de Madrid o Sevilla. El Cholo lo querría en la plantilla, ya que sabría adaptarse a la plantilla del míster. No obstante ninguno ha puesto una oferta sobre la mesa aún, ya que el principal problema es el precio que pide Ángel Torres por el jugador.

El jugador llegó al Getafe cedido por el club Boston Rivers, por lo que el club madrileño posee el 50% de los derechos del jugador y ambas partes deberán negociar para ponerle el precio final al uruguayo.

El precio de salida que le ha puesto el presidente a Arambarri es de 25 millones, precio que los equipos no están muy por la labor de pagar. Aunque como están divididos los derechos, esos 25 millones se pueden quedar en 12,5 millones de euros si deciden comprar la parte del Getafe.

Hay que decir que el Valencia también estaría interesado en el jugador, más concretamente su nuevo entrenador, José Bordalás. El míster, que ya ha entrenado a Arambarri en el Getafe, sabe cómo juega el centrocampista y lo quiere en su nuevo equipo. Sin embargo, al igual que el Atlético o el Sevilla, los 25 millones es un precio que el conjunto che no se puede permitir.

Al jugador charrúa le quedan aún dos años de contrato con el Getafe, pero viendo la cantidad de pretendientes que tiene, seguramente acabe saliendo y cambie de equipo la próxima temporada, ya que es una gran oportunidad para seguir creciendo.