Continúa la operación salida en el Real Madrid. Al mismo tiempo, continúa el sueño de traer a Mbappé al Bernabéu este mismo verano. Todo tiene que ver, y es que si el Madrid quiere presentar al PSG una buena oferta, primero tienen que obtener el dinero vendiendo. Tras las salidas de Sergio Ramos, Brahim, Kubo y Raphael Varane, el Real Madrid espera sacar más dinero con las salidas de Odegaard y Jovic.
El noruego volverá al Arsenal. Tras muchas semanas rumoreándose su salida, después de no querer luchar por un puesto en el equipo y no contar para Ancelotti, parece que ya será definitivo. El club blanco ya ha negociado con el de Mikel Arteta, que fue quien hizo a Odegaard sentirse importante la última temporada. Salvo sorpresa, la salida del jugador se hará oficial en las próximas horas. Aún no se sabe si será una nueva cesión o un traspaso definitivo, quizá con opción de recompra para el Real Madrid. Supondrá una salida importante para la entidad de Florentino Pérez, que pelea por traer a un galáctico antes de que acabe el mercado.
El otro movimiento, aunque menos avanzado, es el de Jovic. El serbio tampoco cuenta para Ancelotti, más aún tras una pobre pretemporada y un gran nivel de Karim Benzema. Ya estuvo cedido en el Eintracht la pasada campaña, y podría repetir cesión, esta vez a Italia. El club merengue quiere aguantar sin venderle y buscan una cesión en la que el atacante de 23 años pueda volver a su mejor nivel. Jovic, por su parte, confiaba en poder demostrar su valía vestido de blanco, pero no parece que estén de acuerdo en el Madrid. El club interesado por él es el Inter de Milán, que ha perdido a Lukaku, su delantero estrella, por un traspaso récord, y buscan un refuerzo en la delantera, además del ya fichado Dzeko.