El Sevilla FC y el CA Osasuna se han visto las caras en el Ramón Sánchez Pizjuán para disputar la 12º jornada de LaLiga Santander. A pesar del gran juego de los dos equipos, el duelo se resolvió con una victoria a favor del equipo andaluz.

Eran las 16.15h cuando Del Cerro Grande indicó el inicio del choque. Durante los primeros compases, el balón no tenía un dominador claro. Los dos equipos tanteaban sobre el césped, tratando de averiguar la mejor manera de herir a su rival. La primera ocasión la presentó el equipo pamplonés. Rubén García lanzó una falta que acabó directamente en las manos de Bono.

La segunda amenaza partió de la bota derecha de Acuña. El argentino se encajó en el área contraria y lanzó un misil que se marchó por encima de la portería de Juan Pérez. Minutos después, Rafa Mir sufrió la misma suerte. El delantero cabeceó un balón contra el césped cerca del palo derecho del guardameta, que se acabó paseando por delante de la portería.

El equipo de Jagoba vio como perdía la posesión y los jugadores sentían la obligación de replegarse atrás como consecuencia de los continuos ataques sevillistas. Alrededor del minuto 20, los locales acaparaban el 86% de la posesión total.

En el ecuador del primer tiempo, los roles se intercambiaron. Osasuna buscaba tímidamente instalarse en la zona rojilla mientras que los anfitriones se esforzaban por defender su área. El equipo de Arrasate comenzó a ganar metros en lo ofensivo, aunque ninguna de sus acciones acabó en gol.

Para romper esa dinámica, el Sevilla metió la sexta por el costado derecho y buscó el primero. Jordán remató un balón procedente de Rakitic que acabó estrellándose contra el palo y cuyo rechace no pudo solventar Montiel.

Todo esto sería un aviso de lo que ocurriría instantes después. A 5 minutos del descanso, Diego Carlos remató un córner botado por Rakitic desde el segundo palo que entró directamente en la portería de Pérez. Con este testarazo, el brasileño ha firmado su segundo gol en esta campaña.

  • Ocampos sentencia al cuadro pamplonés

En el minuto 53, el cronómetro se detuvo por una dura entrada de Areso sobre Acuña. El jugador navarro vio la primera cartulina del partido. También llegaron malas noticias para el conjunto rojiblanco: Montiel se marchó debido a una lesión muscular y forzó la entrada de Jesús Navas al césped. 

Cuando el choque parecía estabilizarse de nuevo, Juan Pérez cometió un error garrafal que supuso la sentencia para el equipo de Arrasate. El portero salió para frenar la galopada de Lucas Ocampos, pero el argentino estuvo avispado para llevarse el balón y orientarlo hacia la portería vacía, convirtiendo el segundo para los suyos.

En el minuto 68, comenzaron a moverse las filas de los dos conjuntos. El técnico del cuadro navarro realizó un triple cambio, donde Iñigo Pérez, Chimy Ávila y Oier abandonaron el terreno de juego para darles paso a Budimir, Kike García y Moncayola.

Lopetegui también movió su banquillo. Primero, llamó a Nemanja Gudelj para sustituir a Joan Jordán. Seguidamente, realizó un doble cambio, donde entraron al verde En-Nesyri y Fernando para darles descanso a Rafa Mir y Delaney.

Después de las sustituciones, Osasuna aumentó la presión. Buscando el área pequeña de Bono, Budimir se cruzó con Acuña y Diego Carlos, quienes le cerraron la puerta por completo.

En la recta final del duelo, Ocampos quiso volver a hacer de las suyas. En-Nesyri cabalgó por el centro del campo para dejarle un caramelito al argentino, quien buscaba de nuevo portería. Sin embargo, su misil impactó en la cara de Juan Pérez.

El partido se extendió hasta el 95, aunque no hubo ninguna acción que modificara el resultado. 

Con este resultado, Osasuna ha caído derrotado por primera vez a domicilio y el Sevilla deja buenas sensaciones de cara al partido del próximo martes. Así, el cuadro hispalense logra el coliderato al estar igualado a puntos con el Real Madrid (24).