Rayo Vallecano y Celta de Vigo firmaron las tablas en un encuentro marcado por el aluvión de ocasiones generadas por los rayistas, que se quedan sin ganar en casa por primera vez esta temporada.
“Dituro ha sido el mejor jugador del partido. Ha estado espectacular”, comentaba resignado el capitán del Rayo Vallecano, Santi Comesaña (vigués, por cierto), al término de los 90 minutos. Y así ha sido. La historia se vuelve a repetir, por suerte o por desgracia (según como se mire). Matías Dituro ha evitado la derrota de un Celta que se ha visto muy superado en grandes tramos del partido por un Rayo que juega con una alegría e ilusión propias del Celta de la pasada campaña. En estos días de Halloween, Samaín, meigas y demás, bien se podría haber confirmado que Iraola le ha robado la pócima mágica al Chacho Coudet.
"Dituro ha estado espectacular"
🚪 @FALCAO llamando a la puerta del @RCCelta y @DituroMatias prohibiéndole la entrada
— LaLigaTV Bar (@laligatvbar) November 1, 2021
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Sí pero no
No obstante, el inicio del choque resultaba prometedor para los intereses del cuadro gallego, que trataba de circular el balón de lado a lado y con rapidez. Además, Coudet disponía de una alineación que a priori le propiciaba una mayor predisposición a la hora de conservar la posesión, juntando en el centro del campo a Renato Tapia, Fran Beltrán, Denis Suárez y Brais Méndez.
Sin embargo, poco a poco el Celta iba perdiendo fuelle y el Rayo se envalentonaba con cada oportunidad de peligro que creaba. Era realmente asombrosa la facilidad con la que los pupilos de Iraola lograban generar tantos espacios, atacando las espaldas de los laterales una y otra vez. Quien mejor entendió el partido fue Fran García. El suyo fue un partido redondo y se está confirmando jornada tras jornada como uno de los mejores laterales de LaLiga.
El canterano del Real Madrid llegaba hasta línea de fondo y buscaba la cabeza de Falcao, que si algo se le da bien es el remate. El lateral izquierdo rayista colgaba centros al área una y otra vez. Si no lograba conectar con el ‘Tigre’, los hombres que llegaban desde segunda línea se encargaban de finalizar jugada. Es el caso de Isi Palazón, cuyo disparo desde la frontal del área a punto estuvo de colarse en la portería custodiada por Matías Dituro.
Lesión de Santi Mina
Por otro lado, llegaban más malas noticias para Coudet y los suyos. El ex de Internacional de Porto Alegre se vio obligado a romper la dupla Thiago Galhardo - Santi Mina cuando este último caía lesionado en el minuto veinte. Unas molestias musculares impidieron ver más una asociación que ya había cuajado muy bien en Getafe hace tan solo una semana. Con Iago Aspas en el banquillo y la consecuente intención de dosificarle de cara a la visita del FC Barcelona este sábado, Coudet decidió incorporar a Augusto Solari en el costado diestro y desplazar a Brais Méndez a la delantera.
El de Mos, que estrenaba capitanía en Liga, se mostró bastante errático durante todo el encuentro. Exactamente igual le pasó a un Denis Suárez que ofreció un rendimiento bastante pobre partiendo desde la banda izquierda. Hasta Renato Tapia, quien regresaba tras un periodo de ausencia por lesión, estuvo bastante fallón. Estos síntomas son bastantes en el resto de piezas del equipo.
Más de lo mismo
En la segunda mitad, pocas cosas cambiaron. El Rayo siguió a lo suyo, intentando derribar de una vez por todas el muro que habían levantado delante de la portería rival Dituro, Murillo y Araújo. El encuentro del mexicano fue especialmente bueno, erigiéndose como uno de los grandes argumentos defensivos del Celta al sumar 5 despejes, 1 disparo bloqueado y 3 intercepciones, habiendo perdido tan solo 3 duelos individuales.
Tanto Coudet como Iraola empezaron a agitar sus banquillos en busca de una forma a través de la cual decantar la balanza a su favor. El primero en mover ficha fue el entrenador sudamericano, quien incluyó a Nolito y Fontán en el lugar de Javi Galán y un Fran Beltrán que volvía a casa entre pitos y aplausos. A la vez llegaba la ocasión más clara para el Celta en todo el choque. Brais Méndez se plantaba solo frente a Dimitrievski y su intento de picadita se marchaba por encima del larguero. El árbitro señaló fuera de juego, pero en caso de haber anotado, el VAR hubiese revocado la decisión al encontrarse Brais en posición legal.
Ya a falta de diez minutos para el pitido final, Iago Aspas saltaba al verde de Vallecas. El 10 celeste, que contaba con un puntito más de frescura que el resto, intentó encontrar el camino a un gol que le hubiese dado la victoria a su equipo, pero no pudo ser. Finalmente, el Celta se convierte en el primer equipo en sacar un punto en casa del Rayo Vallecano esta campaña.