Fútbol Club Barcelona y Real Madrid se enfrentaban el miércoles 19 de enero en el partido correspondiente a la primera semifinal de la Supercopa de España 2022. La Ciudad de Fútbol de las Rozas acogía el apasionante duelo.

El encuentro terminaría con victoria azulgrana por la minima (1-0), en un partido en el que la gran actuación de Misa Rodríguez evitó que el Barcelona lograra más goles,

Lucha por la posesión

La primera parte iniciaba con ambos equipos en busca de la posesión, tanto Barça como Madrid querían tener el dominio inicial de la posesión. La disputa por el balón se mantuvo los quince primeros minutos, hasta entonces el conjunto blanco estaba logrando incomodar a su rival. No en cuanto a generar peligro, pero sí de anular una de sus mayores virtudes como es tener el control del juego.

A pesar de no controlar los primeros minutos de juego, las azulgranas generaban peligro cada vez que se acercaban al área. La primera ocasión del partido iba a ser para Rolfö, la jugadora sueca aprovecharía un mal rechace de la defensa madridista y obligaría a la guardameta rival a realizar una gran intervención para evitar el primer gol del partido.

El control y las ocasiones para el Barça

Con el paso de los minutos el Real Madrid desistió en la idea de intentar controlar el encuentro y dejaron de presionar en campo contrario de manera tan intensa. Por su parte, las de Giráldez empezaban a estar más cómodas sobre el terreno de juego y sin la presión del rival llegaban con más rapidez a zonas de peligro.  El ataque culé pasaba en su mayoría por las bandas, puesto que el Madrid estaba cerrando muy bien los espacios por dentro. El equipo dirigido por Alberto Toril​ realizó una gran primera mitad, sobre todo en cuanto a lo defensivo. Lograron mantener un bloque  muy cerrado sin fisuras interiores y sin la necesidad de encerrarse en exceso atrás. La línea defensiva estaba situada en tres cuartos de campo, -con algunas excepciones-  lo que provocó que las atacantes del Barça quedaran en fuera de juego en múltiples ocasiones.

Las llegadas por bandas

El poco espacio por dentro obligó a las azulgranas a buscar el peligro por fuera y casi todas las ocasiones llegaron por centros laterales de Leila por la banda izquierda o Martens por la derecha,  aunque los remates no cogieron portería. Al filo del descanso Jennifer  tendría la ocasión más clara partido, Hermoso robaría el balón en una zona con mucho riesgo y se iría directa hacía la portería rival, sin embargo, en el mano a mano Misa estuvo muy acertada. 

Mismo guion 

El segundo tiempo empezaría de la misma forma que terminaba el primero, con la misma protagonista. Jenni Hermoso iba a disparar en la frontal del área, pero el balón se marchaba rozando el palo. El conjunto azulgrana estaba ofreciendo un auténtico monólogo futbolístico, las llegadas cada vez eran más claras y pese al buen trabajo del rival, el resultado no reflejaba lo que sucedía en el campo.

El Madrid avisó

Llegada la hora de partido y con cero a cero en el marcador, el Real Madrid tuvo la ocasión más clara del encuentro en uno de sus primeros acercamientos. Claudia Zornoza sorprendía a todo el mundo sacando un disparo desde la frontal que se topaba con el palo, posteriormente Sandra Paños sin querer estuvo a punto de introducirlo en su portería. Afortunadamente, para la guardameta internacional con España el esférico no terminó dentro.

Objetivo fijado

El aviso del Madrid no cambió los planes del Barcelona que seguía generando constantes llegadas al área rival. Los disparos que antes se marchaban fuera, empezaban a coger portería. Las de Jonatan Giráldez se topaban una y otra vez con Misa Rodríguez, la guardameta también internacional con España, fue la mejor jugadora de su equipo, evitando que el gol del rival llegará mucho antes. Destacar una intervención a bocajarro a un remate de Paredes con la cabeza y a una efectiva estirada ante un disparo de Putellas

A pesar de Misa, no hubo milagro para el Madrid

Parecía un milagro que el Barcelona no fuera por delante en el marcador y no fue hasta el añadido del noventa que llegaría el único tanto del partido. La jugada la iniciaba Hermoso por banda derecha con un centro raso, Ohshoala cazaba el esférico, pero su disparo se iba al palo, el balón termino en las botas de Alexia Putellas que con un golpeo seco de primeras mandaba la pelota al fondo de la red y a su equipo hacía las semifinales.