Noche gélida en Logroño como carta de presentación para la 19ª jornada de 1ª RFEF, la que marcaba a su vez el ecuador de la competición. El Racing se medía a la SDL en una salida más complicada de lo que marca la clasificación debido al buen hacer de los pupilos de Llona con el balón, donde destaca su juego combinativo desde la zaga.

GFR sacó un once competitivo en búsqueda de los 3 puntos, destacando la vuelta del riojano Bobadilla al eje de la defensa (ya recuperado) y de Jack Harper,, al que se le vio con más chispa que a Cedric en la jornada pasada ante el Sanse. Borja Domínguez se mantenía en la sala de máquinas junto a Fausto Tienza, dando así descanso a Íñigo debido a la jornada intersemanal (miércoles 21:00 ante el R. Ferrol).

Sin embargo, el encuentro no transcurrió como se esperaba para los intereses racinguistas. El partido estuvo muy trabado en la primera parte gracias a una presión efectiva de los cántabros, que no impidió sin embargo que los logroñeses gozasen de las ocasiones más claras. Un par de acciones de Soberón (incluido un mano a mano donde Parera achicó a las mil maravillas) y un remate muy claro de Jon Ander (donde pudo haber penalty del propio Parera) presagiaban el tanto local. Los atacantes ex-racinguistas mostraron calidad y frescura, especialmente Soberón que está cuajando una temporada más que notable. Jugador cuya progresión no debería pasar desapercibida para los intereses del Racing debido a sus raíces cántabras. 

En cualquier caso, el partido llegaba al descanso manteniendo el empate sin goles inicial pero con el equipo local victorioso "a los puntos". 

Escasa reacción

La segunda parte comenzaba pero los problemas de la primera se mantuvieron: El equipo no ponía en aprietos a la SDL con balón. Ni Borja ni Fausto fueron capaces de imprimir la velocidad necesaria al juego para que Soko, Bustos o Pablo Torre recibieran en posiciones de ventaja, pasando así muy desapercibidos. Apenas Pablo Torre fue capaz de recibir y encarar en contadas ocasiones, pero muy por detrás de su zona de mayor influencia (la frontal del área). Por tanto, ambos extremos fueron sustituidos por el juvenil Yeray (min. 60) y Camus (mi. 75) buscando ese extra de frescura que permitiese gozar de algún acercamiento. 

Mientras tanto, aún tuvieron los rojiblancos alguna ocasión clara que sumar donde pudieron adelantarse: Otro mano a mano clarísimo de Sandoval (que sustituyó a Jon Ander tras el choque con Parera) que el delantero mandó a la grada. Desajuste defensivo del equipo que no se debería producir si los esfuerzos están dirigidos casi exclusivamente a anular al rival.

Como última baza, GFR también dio entrada a Manu Justo por Harper, así como a Sergio Marcos por Borja tratando de ser más incisivos con balón. En estos minutos finales, el equipo local se encerró buscando minimizar el arreón final de los racinguistas, pero la moneda cayó cara para los intereses verdiblancos: Sergio Marcos filtró (por fin) un buen pase para Camus, que (por fin) encaró a su par poniendo un buen balón al área donde, esta vez sí, Manu Justo tiró de calidad para batir al guardameta (min. 86). Buen gol de los tres protagonistas que, por esta vez, dieron la razón a los cambios de Romo. Pese a todo, mucho que mejorar si se quiere seguir la estela del Depor, que no afloja y se impuso también al DUX (2-3) manteniendo la ventaja de 6 puntos.

Esta victoria en Logroño es oro y los 3 puntos han de valorarse como tal. Sin embargo, hay plantilla para proponer más alternativas y situaciones de peligro para que la suerte de cada encuentro no dependa exclusivamente de una genialidad puntual o de la única acción que tengan nuestros puntas. Cuantos más billetes compremos, más probabilidades habrá de conseguir el premio (del gol).

Con todo, el Racing cierra la primera vuelta con 37 puntos y con 6 de distancia respecto al 3er clasificado. Una situación privilegiada en esta nueva 1ª RFEF que debe luchar por mantener, enfatizando aquello que nos ha traído hasta aquí (solidez defensiva) y trabajando en las carencias del equipo (falta de ideas al margen de genialidades ofensivas).