Tras la finalización de una campaña liguera sobresaliente, encabezando el Grupo 5 de la División de Honor Juvenil por delante del Real Madrid, el Atlético de Madrid accedió junto a RC Celta, Real Betis, RC Deportivo de La Coruña, Athletic Club, UD Las Palmas, FC Barcelona y Valencia CF a la Copa de Campeones de la División de Honor Juvenil, disputada entre los campeones de los 7 grupos de la categoría y el subcampeón con más puntos, determinando al mejor club juvenil nacional de la temporada.

En el sorteo realizado este mismo lunes, el Atlético de Madrid conoció a su rival, el RC Celta de Vigo, campeón del Grupo 1, en lo que sería la primera piedra en su camino al título, que redondearía la sobresaliente temporada, hasta el momento, de los de Ricardo Ortega y Fernando Torres.

Inicio agitado

Los rojiblancos pusieron en liza su once más reconocible, el que les ha llevado a la gloria tanto en liga como en la Youth League, con hombres clave como Alejandro Iturbe, David Navarro, Pablo Barrios o Javier Currás.

Desde el inicio, la tensión de una eliminatoria a partido único era palpable, pues los dos conjuntos salieron expectantes y sin querer cometer errores. El primero en golpear fue el RC Celta, que, tras una ocasión inicial de Currás, que disparó a las manos de César, aprovechó un gran centro que Martín Conde se encargó de rematar al fondo de las mallas de Iturbe. Los locales quedaron en shock con la estocada de los gallegos, y estos aprovecharon para dominar el encuentro para así vivir con tranquilidad el transcurso de los minutos.

Foto: Atlético de Madrid
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Fue ahí cuando aparecieron los hombres rojiblancos de más calidad en tres cuartos, con rápidas combinaciones entre Aitor Gismera, Pablo Barrios y Javier Currás, que deshicieron la enrevesada defensa celtiña para servir un maravilloso balón a Marcos Denia, que no pudo aprovechar pues su remate ante el guardameta visitante se marchó rozando el poste. Tras esto, los rojiblancos se encontraron en una fase de toma y daca, en la que tuvieron alguna que otra ocasión, aunque sin mucho peligro, en las botas de Ilias Kostis y Marcos Denia de nuevo.

Remar hasta remontar

El inicio de la segunda parte fue calcado al de la primera, con el RC Celta golpeando en primera instancia, esta vez por medio de Hugo Álvarez, que envió el balón por encima de la portería rojiblanca. Con el paso de los minutos, debido a la evidente necesidad, los locales tomaron el mando del juego y de las ocasiones. Tanto fue así que César, guardameta celtiña, salvó a su equipo del empate tras realizar una parada antológica al remate de Marcos Denia, que aprovechó un perfecto centro de Sergio Díez.

Foto: Atlético de Madrid
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Los pupilos de Ricardo Ortega y Fernando Torres no iban a cesar en su empeño de remontar el encuentro, e iban a encontrar una clara ocasión en la cabeza de Ilias Kostis, que remató al lateral de la red un saque de esquina botado por Salim El Jebari.

Ante la imposibilidad de anotar el gol que igualaría la eliminatoria, los técnicos locales movieron el banquillo, con la entrada de Sergio Manzano y Julio Díaz, que percutieron por ambas bandas. El juego se centró en el sector derecho, donde Manzano, Sergio Díez y Barrios llevaron la manija. El primero de ellos tuvo en sus botas una clara ocasión rondando el 90, rematando sin demasiada fuerza y a las manos del portero. Aunque lo mejor estaba aún por venir.

Foto: Atlético de Madrid
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El cuarto árbitro decretó 5 minutos de añadido, y los rojiblancos nunca dejaron de creer en la igualada. Primero por medio de un Alejandro Iturbe inconmensurable, que sacó dos increíbles manos a remates de Lucas Antañón, que comandó las contras del conjunto celtiña. Poco después emergió la figura de Pablo Barrios, que se echó el equipo a la espalda y fue el encargado de colgar balones al área celtiña. Y por último Ilias Kostis, héroe rojiblanco, que tras realizar una actuación sobresalienteredondeó su partido con un agónico gol de cabeza en el 95', que hizo desatar la locura en la Ciudad Deportiva Wanda de Alcalá de Henares, y que mandó el partido a la prórroga.

Prórroga a prueba de infartos

Los rojiblancos comenzaron el tiempo extra con la moral por las nubes, tras el empate conseguido en la última jugada del encuentro gracias al cabezazo de Ilias Kostis. Introdujeron un nuevo cambio, dando entrada a Roni en el lugar de Marcos Denia, y fueron a por el encuentro desde el segundo cero. Dispusieron de dos grandes ocasiones, tras dos buenas jugadas tanto de Julio Díaz como de Roni, uno por la izquierda y otro por la derecha respectivamente, aunque no llegaron a ser rematadas con éxito por los delanteros rojiblancos, terminando la primera mitad de la prórroga con el mismo resultado.

Tras una mínima pausa, dio comienzo la segunda parte, en las que los locales siguieron intentándolo, disponiendo de algunas ocasiones en las que estuvieron muy cerca de anotar el gol de la victoria. Estas llegaron en las botas de Julio Díaz, quien embocó un zurdazo seco desde la frontal, y de Lucas Ricoy, que se quedó sin campo regateando al portero. Los celestes resistieron como bien pudieron, consiguiendo llegar vivos a una tanda de penaltis que decidiría el rival del FC Barcelona en las semifinales.

Foto: Atlético de Madrid
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El primero en lanzar fue Pablo Barrios, que batió al portero celtiña, aunque este la tocó. Prosiguió Hugo, por parte de los visitantes, que la envió al fondo de las mallas ante la mirada de Iturbe. El siguiente en el Atleti fue Rubén Valdera, quien mandó al poste su penalti, dándole la alternativa al RC Celta de ponerse por delante, hecho que Iturbe evitó, realizando una gran parada ante Roi. David Navarro reestableció la ventaja rojiblanca, aunque Martín Conde se encargó de igualar la tanda. Fue ahí cuando emergió la figura de César Fernández, que detuvo los lanzamientos de Julio Díaz e Ilias Kostis, dándole así valor al penalti anotado por Meixas entre medias, y mandando al RC Celta a las semifinales de la Copa de Campeones tras vencer por 2-3 en penaltis.

Así finaliza la temporada del Juvenil A del Atlético de Madrid, una increíble campaña en la que se han proclamado campeones de liga, han llegado por primera vez a la Final Four de la UEFA Youth League y han caído en Cuartos de Final de la Copa del Rey y de la Copa de Campeones por detalles. Nada que reprochar a esta excelente camada de rojiblancos dirigidos por Ricardo Ortega y Fernando Torres, que lo han intentado hasta el final y han llevado el escudo del Atlético de Madrid orgullosos allí por donde han ido. Siempre la cabeza alta muchachos, que como dijo Luis Aragonés, solo hay que agachar la cabeza para besar el escudo del Atleti.