El Real Madrid empató en su segundo partido de pretemporada ante el América de México. Los blancos empezaron y acabaron dormidos el partido, concediendo el primer gol a los cinco minutos de partido y el segundo a falta de diez minutos de penalti.

Sin embargo, se vieron mejorías en todas las partes del campo. Pero en especial, la de la delantera debido a la falta de gol tras el partido ante el FC Barcelona. Volvió Karim Benzema a cobrar minutos sobre el césped, y lo hizo con una delicatesen desde la frontal del área, con un efecto paranormal y pegadita al palo imposible de llegar para el Memo Ochoa.

Además, volvió la CMK. Casemiro, Modric y Kroos compartieron cancha por séptimo año consecutivo con una nota alta para los tres jugadores. Mejoran como el vino y esta madrugada de miércoles se vio que a pesar de la edad y las críticas no van a menos.

Ya en la segunda parte, Lucas Vázquez provocó un penalti que supo convertir Eden Hazard en el minuto 55. Un plus de energía y vida para el belga que prometió a la afición un nuevo Hazard.

Benzema da vida

Desde la posición de '9', el francés da vida. Juega de nueve, de diez y de lo que quiera cuando quiera. Parece que vaya con el ritmo de un jugador de mayo y sin embargo apenas tan solo la fecha señala finales de julio.

Disputó tan solo los primeros 45 minutos de los cuales necesitó 22 para meter el primero de la temporada. Se apoyó en los mediocentros para recibir, en las bandas para deshacerse de sus marcas y regateaba entre los defensas. El galo gozó de dos disparos. El del gol y otra jugada en solitario de la que se metió entre dos defensas y definió con la derecha rozando la escuadra.

 

Debut de Vinicius Tobias

El flamante fichaje del Real Madrid debutó de manera agridulce. El lateral fue quien provocó el penalti a favor del América y que supuso el empate. Sin embargo, no debió ser señalado penalti debido al piscinazo de Fidalgo. El árbitro cayó en la trampa y condenó a Tobias y a su equipo.

Hay mejorías en Tchouameni

El primer partido fue de presentación, de adaptarse al equipo y a las exigencias del míster. Este ha sido su encuentro para quitarse los pesos de encima. Se le vio más móvil, llegando a área contraria, filtrando pases y cortando jugadas con peligro.

Sus 80 millones de euros que se pagaron se empiezan a ver reflejados en el campo. Junto al medio del campo del futuro, Valverde y Camavinga, darán muchas alegrías al madridismo.