Corren malos tiempos para el antimadridismo. Líder en solitario tras disputarse las primeras cuatro jornadas ligueras, el conjunto de Carlo Ancelotti arrancó esta nueva temporada 22/23 sin conocer la derrota. A pesar de disputar sus tres primeros partidos como visitante, los blancos, supieron inclinar la balanza a favor del actual campeón de Liga, consiguiendo el pleno de puntos.
Complicados enfrentamientos contra un recién ascendido Almería, un rocoso Celta y un siempre complicado Espanyol como local, pusieron contra las cuerdas en más de una ocasión al equipo madrileño. Sin embargo, y al igual que ocurriría en su estreno como local frente al Betis, los hombres de Ancelotti sacaron a relucir, una vez más, ese “ADN” de campeón activable exclusivamente con la elástica blanca.
No obstante, la cuarta jornada liguera no dejaría indiferente a nadie. Con el mejor escenario posible, el Santiago Bernabéu se vestía de gala para recibir al Real Betis Balonpié, en un enfrentamiento que reunía a los dos mejores equipos españoles hasta la fecha. Ocupando la cúspide del campeonato nacional, los verdiblancos no se lo pusieron nada fácil a los locales. Como si un director de orquesta se tratase, Sergio Canales dirigió el juego visitante a un nivel sublime, convirtiéndose en el dueño y señor del centro del campo, poniendo contra las cuerdas a Luka Modrić y Eduardo Camavinga. Finalmente, los locales se llevarían la victoria con goles de Vinícius Júnior y Rodrygo Goes, éste último, tras asistencia de Valverde.
Y es que el joven centrocampista de Montevideo se ha convertido en uno de los indiscutibles para el técnico italiano en los partidos importantes. Su increíble despliegue físico y su indiscutible compromiso sobre el césped, unido al gran entendimiento con la ofensiva blanca, le han llevado a ocupar el último puesto libre en el once titular del conjunto blanco. Asistencias como la de París, sirviéndoles para levantar la decimocuarta Champions o, como la de Escocia, permitiéndoles abrir el marcador frente al Celtic, reflejan la importancia del uruguayo en el devenir del actual campeón de España y de Europa en sendas competiciones.
De hecho, ambas asistencias tuvieron un destinatario común: Vinicius Junior. El brasileño, quien fue cuestionado años atrás por su falta de puntería de cara a puerta, pasa por su mejor momento en la capital. Considerado uno de los líderes del presente y, destinado a ser uno de los referentes del Real Madrid del futuro, adquiere un mayor protagonismo tras la lesión de Karim Benzema, convirtiéndose en la principal baza en la que se apoya cada uno de los aficionados blancos.
Vinicius – Valverde. Valverde - Vinicius. Dos jóvenes y talentosos jugadores que aterrizaron en la capital con el objetivo de abrirse hueco en el mejor equipo del mundo. Aunque sus inicios no fueron sencillos, gracias a su esfuerzo, a su trabajo y a su lucha por alcanzar su sueño, se ha convertido en el presente y futuro del conjunto blanco. Una realidad que, de seguro, traería consigo más de una alegría al feudo blanco y, más de una trágica noche, al antimadridismo disfrazado.