El atípico año de mundial que estamos viviendo hace comprimir el calendario de los meses de octubre y de noviembre. El próximo mes le depara al Sevilla, ni más ni menos que 9 compromisos, incluidos ante el Atlético de Madrid, Real Madrid, Borussia Dortmund (doble enfrentamiento) y Copenhague. Octubre dará paso a noviembre, que tocará decidir, si no está decidido ya, el futuro en Europa en el Etihad, el derbi en el Villamarín y recibir a la Real Sociedad.

Fernando Reges en el partido ante el Villarreal. Fuente: web Sevilla FC
Fernando Reges en el partido ante el Villarreal. Fuente: web Sevilla FC

Visto así, todo parece negativo, pero hay algunos aspectos que serán clave para determinar este tramo y donde se pueden agarrar los aficionados sevillistas para creer y confiar en este equipo:

  • El Sánchez-Pizjuán debe volver a ser un fortín

El templo sevillista siempre ha sido reconocido como uno de los más temibles de toda Europa, no solo por lo que aprieta la grada, sino por lo difícil que sonsacarle siquiera un empate al conjunto sevillista. En cambio, esta temporada está siendo todo lo contrario. El equipo nervionense acumula un empate y dos derrotas en casa, con tan solo un gol a favor (regalo de Sergio Asenjo incluido) y 8 en contra.

Volver a hacer de Nervión una guarida para los locales y un infierno para los adversarios debe ser primordial en esta difícil misión de resurgir con un calendario tan apretado y adverso. Para hacer resurgir Nervión hacen falta tres factores: equipo, afición y suerte. De momento, solo está respondiendo la afición. La primera semana dictará sentencia: Atlético de Madrid, Borussia Dortmund y Athletic Club, los tres compromisos en casa.

El Sánchez-Pizjuán vistiéndose de gala antes del partido ante el Real Madrid la pasada campaña. Fuente: GettyImages
El Sánchez-Pizjuán vistiéndose de gala antes del partido ante el Real Madrid la pasada campaña. Fuente: GettyImages
  • Jugadores con posibilidad de acudir al Mundial

Recordemos que estamos al acecho de acudir a una cita mundialista y que hay jugadores, que o bien quieren recuperar su nivel para ser seleccionados, o bien necesitan reforzar la confianza de sus seleccionadores en ellos para confirmar su presencia.

El tener un gran campeonato por delante siempre es una motivación extra para cualquier jugador. Isco Alarcón podría retornar a la ‘Roja’ de Luis Enrique de donde era insustituible hasta que dejó de jugar con el Real Madrid.

Isco Alarcón disputando un partido con España hace años. Fuente: GettyImages
Isco Alarcón disputando un partido con España hace años. Fuente: GettyImages

Otro ejemplo bien distinto sería el caso de Gonzalo Montiel. El lateral derecho fue indiscutible en la Copa América 2021 y eso le llevó a recibir la oferta del Sevilla. Lionel Scaloni continúo confiando en él pese a su aceptable primera temporada como sevillista, pero su inicio de campaña no está ayudando a que el seleccionador siga dándole confianza, de hecho, ha perdido la titularidad con Nahuel Molina.

  • Julen Lopetegui, en la cuerda floja

El vasco lleva medio año siendo muy cuestionado por la afición y gran parte de ella, ya lo da por sentenciado desde hace meses. Lo cierto es que en la directiva no se opina así, o no se opinaba hasta hace relativamente poco. Las últimas informaciones apuntan a que Monchi se ha convertido en su único defensor dentro de la entidad, tanto íntegra como públicamente, y éste no tiene el poder o la convicción suficiente como para retenerlo la próxima vez que haya un mal resultado. Esto hace que el entrenador deba esforzarse al máximo y darlo todo para no perder su puesto o dejar en bandeja su finiquito y va a dar el máximo para mantener su puesto.

Julen Lopetegui en el partido ante el Villarreal. Fuente: web Sevilla FC
Julen Lopetegui en el partido ante el Villarreal. Fuente: web Sevilla FC

El cuadro hispalense se juega media temporada y parte del presupuesto para la temporada próxima en menos de mes y medio. Solo la idea de quedar eliminado del grupo de Champions, o incluso no llegar a clasificar ni a Europa League amenaza las cuentas en las oficinas de Nervión, que no están para echar cohetes. Y los presagios no son positivos. Se ve a un equipo que no tiene nivel, ni deportivo, ni físico ni mental para afrontar dicho desafío. El tiempo dictará sentencia, tanto al Sevilla, incluyendo toda su directiva y Monchi, como a Julen Lopetegui y a sus pupilos.