La Champions League 23-24 contará con la Real Sociedad, eso parecía al final del encuentro ante el Real Madrid del pasado 29 de enero de 2023. Sin embargo, 10 jornadas después de aquel empate en el Santiago Bernabéu, la clasificación a la máxima competición europea a nivel de clubes del conjunto donostiarra no está tan clara. Los de Imanol tan solo han sido capaces de sumar 12 de los últimos 30 puntos, y eso les ha puesto por debajo del Atlético de Madrid, y cerca de Betis y Villarreal. Esta mala racha la compensa la magnífica primera vuelta de la Real, en la que fue capaz de acabar tercera con 39 puntos. 

Esta situación solo lleva a los aficionados realistas a hacerse diferentes preguntas. ¿Qué le pasa al equipo? ¿Entrará en Champions? En caso de no entrar entre los cuatro primeros, ¿Será un fracaso? La realidad es que hay diferentes respuestas, pero en la que la mayoría de seguidores coinciden es que, su equipo sigue en cuarta posición, y que depende de sí mismo para jugar contra los mejores del continente la temporada que viene. 

Segunda vuelta para olvidar

La derrota contra el Valladolid en casa fue el comienzo de la decadencia de los de Imanol. Es cierto que el resultado contra los pucelanos no suponía un gran problema, ya que el desenlace fue el mismo que en la ida y, si el resto de encuentros hubieran acabado igual que en la primera mitad del curso, a la Real le faltaría poco para ser equipo de Champions. El problema llegó en seis de los siguientes nueve encuentros, en los que la Real perdió 13 puntos con respecto a la primera vuelta, a los que hay que restarle tres puntos por la victoria ante el Getafe.

Más allá de los resultados, el juego del equipo ya no es igual de bueno. La falta de ritmo, pérdida del factor sorpresa y peor rendimiento de ciertos jugadores han marcado la diferencia. La Real de Imanol se caracterizó por jugar un fútbol directo, pero la realidad en este segundo tramo del curso es que esa verticalidad se ha perdido. A eso hay que sumarle la falta de efectividad de jugadores como Sorloth o Brais, que marcaron la diferencia en muchos partidos con sus goles, o la pérdida de claridad de Silva, Merino o Zubimendi en pases clave. Además de eso, por contradictorio que parezca, la recuperación de todos los lesionados, menos Sadiq, no ha servido para mejorar la situación.

Sorloth y Brais celebran un gol / Foto: Real Sociedad
Sorloth y Brais celebran un gol / Foto: Real Sociedad

Calendario complicado

A ese mal momento futbolístico se le suma el difícil calendario que le queda por delante al conjunto txuri urdin. De los nueve encuentros restantes, siete son ante equipos situados en la mitad alta de la tabla. Entre ellos está el Real Betis, encuentro que se antoja clave para las aspiraciones de ambos. Algo a lo que se pueden agarrar los seguidores realistas es que muchos de esos rivales llegarán, sin "nada" en juego, como el Barcelona, si los resultados les acompañan, o el Girona, o con la mirada puesta en otras citas como el Real Madrid y Osasuna con la mirada puesta en la final de Copa y, en el caso de los madrileños se les suman las semifinales de Champions. 

La media de puntos para quedar cuarto, teniendo en cuenta las últimas cinco temporadas, es de 70,2, por lo que los de Imanol tendrían que conseguir 19 puntos en lo que resta de temporada, en caso de que se repita lo ocurrido en el último lustro. Ni la racha, ni los próximos rivales animan al optimismo, pero si de algo pueden estar seguros en Donostia es de que su equipo sigue cuatro puntos por encima del siguiente en la tabla, y que dependen de sí mismos para ver rodar el balón estrellado por el césped del Reale Arena la próxima temporada.