La Real no fue capaz de mantener la ventaja de dos goles que obtuvo en la primera media hora del encuentro y pierde dos puntos muy importantes en la carrera por la clasificación a la Champions League. Sin embargo, con el empate, los de Imanol sellan su cuarta clasificación europea consecutiva. El Girona, en cambio, saca un punto valioso que le coloca un punto por encima del Athletic, a esperas de lo que hagan los de Valverde ante el Villarreal en su encuentro correspondiente a la jornada 34.

Primera parte

David Silva dio el pistoletazo de salida al encuentro bajo una lluvia digna de noviembre. Los locales impusieron un ritmo muy alto de juego desde el principio, y con los dos minutos de partido casi cumplidos, tras varios rechaces dentro del área, Aihen remató con su pierna diestra desde fuera del área, pero el balón fue directo al poste. En la siguiente jugada, Mikel Oyarzabal convertía el penalti que señaló Figueroa Vázquez tras un derribo de Riquelme a Kubo dentro del área.

Las ocasiones caían de ambos lados, Yan Couto y Kubo pudieron anotar, pero ninguno de los dos acertó entre los tres palos. La Real seguía dominando el encuentro y la grada local repitió la, ya conocida, celebración de espaldas al campo después de que David Silva mandara al fondo de las mallas un magnífico centro de Kubo. 

Merino busca un pase para Sorloth / Foto: Real Sociedad
Merino busca un pase para Sorloth / Foto: Real Sociedad

Cumplida la media hora de partido, el Girona fue creciendo y estuvo cerca de acortar distancias. Primero Arnau y luego Stuani pudieron marcar, pero la falta de acierto del defensor catalán y una tremenda estirada de Remiro, negaron el primero a los visitantes. A la tercera fue la vencida y en el 37 con la ayuda de la defensa realista, Yan Couto culminó su llegada por la izquierda poniendo el 2-1 en el electrónico. Todavía quedaba emoción en la primera parte. Primero Tsygankov, con un golpeo lejano, puso en apuros a Remiro, que mandó el balón a corner. Por último, con el tiempo de descuento cumplido, Riquelme centró una falta, que encontró a Stuani en medio de toda la defensa rival y, este, hizo el empate justo antes del descanso.

Segunda parte

El segundo tiempo fue bastante más tranquilo que el primero. Ambos equipos tuvieron oportunidades, pero las más claras fueron de color txuriurdin. En el minuto 56 Kubo, tras una buenísima jugada individual, dejó a Silva en boca de gol, pero el canario no acertó con el control en primera instancia y su golpeo, un tanto forzado, salió muy centrado.

Poco después otra genial jugada individual esta vez de Riquelme, acabó con Stuani siendo incapaz de conectar un buen cabezazo al centro del canterano del Atlético de Madrid. Justo en la próxima llegada realista, Kubo se sacó un buen golpeó desde fuera del área que Gazzaniga sacó sobre la línea. 

Hubo que esperar hasta el minuto 81 para volver a ver una jugada de verdadero peligro. Aihen, queriendo o sin querer, estuvo a punto de engañar a Gazzaniga con un "centrochut" que el argentino sacó al límite con su pie derecho. Le estaba sabiendo a poco el empate a la Real y no se rendían los de Imanol. Tuvieron la última en el 85. Kubo sacó de esquina y Carlos Fernández, de cabeza, estrelló el esférico contra el larguero de la portería rival. 

Sustituciones

Imanol hizo tres de los cinco cambios posibles. En el 63, Zubeldia y Oyarzabal, ambos amonestados, dejaron su lugar a Barrenetxea y Pacheco respectivamente. En el minuto 83, Carlos Fernández sustituyó a Sorloth en la punta de ataque.

Michel, por su parte, hizo todos los cambios. En la primera ventana, Miguel Gutiérrez sustituyó a Javier Hernández. En la segunda, los goleadores, Yan Couto y Stuani dejaron su lugar a Artero y Reinier. En la tercera y última ventana, Callens y Juanpe entraron por Ivan Martín y Riquelme.

Amonestaciones

Por parte de los locales, Zubeldia, Le Normand, Oyarzabal y Barrenetxea vieron la amarilla. Por parte de los visitantes, Oriol Romeu, que vio dos amarillas y no acabó el encuentro, y Arnau Martínez, que pudo ver la segunda amarilla, fueron los únicos amonestados, además del entrenador, Michel.