El nivel de los árbitros esta temporada ha sido bueno, siempre hay errores pero no diferentes al que cometen jugadores, entrenadores o directivos. Esta semana con el permiso de los lectores de VAVEL no voy a comentar la polémica, pero me gustaría hacer una pequeña reflexión.

"Han puesto límites de edad para poder ascender de categoría. Los Comités Territoriales se están llenando de adolescentes"

Hoy en día, el Comité Técnico de árbitros exige a los Comités Territoriales que aporten colegiados jóvenes, y los Comités Territoriales para conseguir las exigencias de la Nacional, están regalando las categorías a todos los colegiados nuevos, dejando a los veteranos en un segundo lugar, incluso han puesto límites de edad para poder ascender de categoría,  así solo pueden presentarse a las pruebas, físicas y técnicas, los más jóvenes, aunque tengan un nivel inferior a los más experimentados. Por dicho motivo, en la actualidad los Comités Territoriales se están llenando de adolescentes, que saben que por poco que hagan van a subir de categoría, de paso ganarían unos euros y quien sabe a lo mejor consiguen llegar lejos en este mundillo.

Nos guste o no, tenemos que tener claro que una cosa es el fútbol profesional y otra muy diferente es el balompié aficionado. Un jugador puede estar en un club de regional y pasar la temporada siguiente a jugar en Primera División; sólo tiene que pasar un reconocimiento médico y estampar la rúbrica sobre el papel, de hecho este modelo de seleccionar a los jugadores ha hecho que tengamos peloteros de alto nivel.

"Sustituiría el sistema actual de ascensos y descensos de árbitros por uno similar al que tienen los jugadores, que pueden pasar de Regional a Primera con un reconocimiento médico y una rúbrica"

Por ese motivo, una de las cosas que cambiaría para que pudiesen estar los mejores colegiados en la liga de fútbol profesional y aumentar el nivel de los árbitros, es cambiar el sistema actual de ascensos y descensos que se utiliza en la actualidad, lo sustituiría por uno similar al que tienen los jugadores.

En el mundo del arbitraje tenemos que tener claro una cosa: “Un encuentro de fútbol en líneas generales es fácil de dirigir”, sólo se requiere al especialista en reglas de juego, en momentos determinados y en partidos en concreto. Si se realizan designaciones de árbitros a partidos sin transcendencia, éstos los sacaran a delante sin problemas, todos sabemos que los árbitros buenos se ven en los partidos importantes. Pondré un ejemplo para que puedan entenderlo mejor:

Imaginemos que uno va con el coche por la carretera general y el vehículo se sale por el arcén, teniendo un accidente, viene la grúa se lo lleva y nadie se entera, eso es lo que pasa en fútbol regional.

En Segunda B, un problema o un mal partido de un árbitro como en el coche que se sale de la carretera y tiene un accidente, se sabrá como mucho en el barrio o la ciudad que sucedió el incidente, pero no tiene repercusión.

En Segunda División hay que tener más cuidado cuando el partido es televisado, de resto puedes pasar desapercibido.

Pero en el fútbol de Primera, si pisas la línea continua se entera hasta el "gato del Vaticano".

"Los mejores árbitros destacarían con naturalidad, aguantarían los mejores sobre el terreno de juego y no los colegiados de despacho como pasa en la actualidad"

Por ese motivo establecería un proceso de selección más moderno, establecería en fútbol profesional un nuevo equipo, el de los árbitros. Estaría dividido en dos categorías: Primera y Segunda División, concentrados en la Ciudad del Fútbol y funcionando exactamente igual que un equipo de fútbol.  En lo que se refiere a los ascensos y descensos, estos saldrán de los informes de sus partidos. Todas las semanas saldrá la clasificación y nota de los colegiados, así sabrán cuál es su situación y la de los demás compañeros.

De este modo, los mejores árbitros destacarían con naturalidad, aguantarían los mejores sobre el terreno de juego y no los colegiados de despacho como pasa en la actualidad, que cuando surgen los problemas miran hacia el otro lado.

En el otro fútbol, el amateur, seguiría con el modelo actual, con la diferencia que tendría ojeadores en todos los campos; elegidos por el Comité Nacional, que harán un seguimiento a los colegiados y de ahí saldrán los mejores, que serían seleccionados y contratados para el equipo profesional de árbitros.