El Alavés cayó el pasado sábado en la gran final de copa frente al FC Barcelona. Los de Mauricio Pellegrino no obtuvieron recompensa en un gran derroche físico de la plantilla. La mala suerte y la polémica privaron al equipo de levantar su primer título oficial.

Comienzo igualado

 Ambos equipos prefirieron la calma: empezaron a jugar sin riesgos al estar en un partido de esta importancia. Al principio, avisó el Barcelona con un impresionante pase de Messi a Jordi Alba, que quiso dársela a Alcácer, sin éxito. Mientras, Mascherano y Llorente chocaban en el aire en la lucha por un balón, y ambos se dieron un fuerte golpe en la cabeza: el albiazul tuvo que jugar todo el partido con venda además de tener que ser hospitalizado después del partido, mientras que el argentino se retiro en el momento por una brecha y la mala caída, que le originó un esguince en la rodilla.
 
El Alavés mantenía una gran presión, y en el minuto 25 Ibai le robaba el balón a Piqué y hacía temblar Barcelona con un disparo que pegó en el palo y rodó por la línea, para acabar en los pies de Deyverson, que con poco ángulo disparó sin éxito.
 
El Barça reaccionaba a esto con una gran combinación entre Messi y Neymar que acabaría en el fondo de las mallas tras un disparo desde el borde del área del Argentino: 1-0 para los culés. Pero el Alavés no bajaría los brazos: una falta en la esquina del área acabaría en gol tras un zurdazo magistral de Theo, que hizo que el balón se colase por la escuadra, ante la incredulidad de los culés. La locura estallaba en la grada albiazul, que nunca dejaba de creer en las posibilidades de su equipo.
 
El Barça no quería la sorpresa y lo intentó con una falta lejana de Messi, que atajó Pacheco. Pero en la siguiente jugada sería cuando el equipo catalán hiciese el 1-2,  después de que Messi se la diera a André Gomes y este ponía un pase de la muerte a Neymar, que remataba al fondo de la portería. La jugada tendría que haber sido invalidada por fuera de juego en ese último pase.
 
El árbitro añadió 3 minutos en la primera parte. Los vitorianos estuvieron más pendientes de no recibir más goles hasta el descanso y esto les pasó factura. Messi dio otro pase magistral a Paco Alcácer para que este la mandase al fondo de las mallas justo antes del final de la primera mitad.  El Alavés se iba así al vestuario tras ese gol en el último minuto  de los culés, que les quitaba gran parte de las esperanzas. 

El Alavés lo intentaba ante un Barcelona tranquilo

 La segunda parte fue bastante diferente. Es cierto que el Barcelona aviso mediante un remate de Alcácer al principio de la segunda mitad,  qué detuvo Pacheco. Pero a partir de ahí las ocasiones fueron para los alaveses, que no supieron aprovecharlas. En una jugada con muchas ocasiones dónde Sobrino estrelló su disparo contra Gomes y posteriormente Cillessen detendría un peligroso disparo de Rodrigo Ely el Alavés podría haber recortado distancias pero no obtuvo la precisión necesaria para ello. Los aficionados  albiazules no paraban de alentar a su equipo, que nunca dejó de intentarlo.  El recién entrado Camarasa lo intentó desde el borde del área sin éxito y posteriormente Deyverson marcaría gol en fuera de juego  donde hubo polémica ya que no se aprecia muy bien si es Sobrino el que da el pase o es André Gomes el que desvía el balón. Así le anularían el gol al carioca. Los alavesistas también pidieron penalti tras un agarrón de Piqué pero Clos Gómez no lo vio así.
 
De esta manera acabaría este histórico partido para los alavesistas, que, a pesar del resultado, quedará marcado en las retinas de todos. Los jugadores acabaron decepcionados por no poder ganar el trofeo y ofrecerselo así a la magnífica afición vitoriana.
A pesar de eso, los 25.000 desplazados solo podían estar agradecidos al equipo por esta increíble temporada que les han brindado los jugadores. 
 
Ahora solo queda ver el futuro de algunos jugadores. De momento se da prácticamente por hecho que Marcos y Theo no continuarán y se irán al Real Madrid. Camarasa y Deyverson volverían al Levante, aunque ambos parecen interesados en quedarse. Pacheco y Femenía suenan para algunos equipos, aunque de momento no hay nada oficial. Otro cedido que se irá parece que será Rubén Sobrino. Lo mismo pasa con Adrián Ortolá, que apenas ha tenido minutos.