En una temporada tan completa como la del Deportivo Alavés, es difícil encontrar cual ha sido el mejor partido de los casi 50 que han disputado los babazorros. La vuelta de las semifinales de la Copa del Rey frente al Celta, la victoria en Mendizorrotza frente al Villarreal o el empate en casa frente al Atlético son buenos candidatos.

Sin embargo, el que ha sido el duelo de la temporada lo es por su impacto. Se trata de la victoria lograda en la tercera jornada de Liga frente al Fútbol Club Barcelona, por entonces vigente campeón de Liga. Un resultado excelente para un recién ascendido, en el que se pudieron ver los primeros mimbres del cuadro de Pellegrino.

1-2 terminó el duelo, con Deyverson marcando el primer gol vitoriano en la primera mitad e Ibai Gómez marcando el definitivo en la segunda. Entre ambos, Mathieu marcó el tanto del empate de un FC Barcelona plagado de los jugadores menos habituales en el once. Una victoria de muchos "quilates".

Cinco defensas y eficacia

Pellegrino optó por primera vez en la temporada por un sistema 5-4-1 con Kiko Femenía y Theo Hernández ejerciendo de carrileros, mientras que Alexis, Laguardia y Raúl García formaban en el eje de la zaga. En ataque, Édgar, Ibai y Deyverson. Los dos segundos se estrenarían como goleadores albiazules en ese duelo.

El guión del encuentro era el esperado. El Barcelona controlando el balón con posesiones largas, cercanas al 70%, y mucha circulación de balón, pero sin llevar verdadero peligro a la meta de Fernando Pacheco. Sólo Aleix Vidal hizo al extremeño esforzarse al máximo para enviar su disparo a saque de esquina. Los vitorianos aguantaban el arreón culé con relativa comodidad.

Cuando ya se superaba la media hora del encuentro llegó el primer zarpazo babazorro. Incorporación desde la derecha de Femenía, que recorta bien y pone el balón al área para que Deyverson se adelante a la defensa rival y marque el primero. El encuentro llegaba al descanso de una forma inmejorable para el Alavés, por delante en el marcador con una comodidad difícilmente esperada.

Asedio del Barça pero aguanta el Alavés

En la segunda mitad el cuadro catalán intentó dar por la vía rápida la vuelta al partido. Empezó bien, pues Mathieu, a balón parado, conseguía empatar el duelo al poco de empezar la segunda mitad. Jarro de agua fría para el Alavés, que veía como su ventaja se desvanecía demasiado rápido. 

El Barcelona aprovechaba que estaba mejor que los vitorianos, e intentaban ponerse por delante en el marcador. Neymar era el jugador que más peligro llevaba para el equipo local. El Alavés contrarrestaba por medio de Édgar, que conseguía marcar, pero el gol era anulado por un dudoso fuera de juego. 

Se quedaron con ganas de celebrar ese gol los albiazules que se habían desplazado a Barcelona, pero poco después pudieron celebrarlo otra vez. Tibia salida del balón de los locales que aprovecha Ibai Gómez, que se mete en el área y bate por bajo a Jasper Cillesen. Llevaba el júbilo a las gradas y al banquillo visitante, que veían como otra vez volvían las opciones de ganar el partido. 

Y así fue, porque ni Messi ni Suárez, saliendo ambos desde el banquillo, conseguían darle la vuelta al marcador. Victoria de mucho mérito para los vitorianos, que daban golpe encima de la mesa en la temporada de su vuelta a Primera División.

Línea ascendente

El Deportivo Alavés ponía en la tercera jornada de Liga su nombre en los titulares de todos los medios. Además, dejaba claro que en su vuelta a primera más de diez años después iban a competir hasta el final. 

Si bien en la siguiente jornada, frente al Deportivo de la Coruña, el cuadro de Pellegrino no consiguió pasar del empate a cero, el club iniciaba una línea ascendente, que le consolidaba lejos de los puestos de descenso. 

Frente al Barcelona jugó el Alavés el que puede ser considerado el mejor partido de la temporada, sobre todo teniendo en cuenta la magnitud del rival. Sin embargo, son varios los partidos que permanecerán en la memoria de los aficionados albiazules en una temporada histórica.