Ha tardado en hacerse oficial, pero lo que era un secreto a voces se ha terminado de confirmar en la mañana del jueves. Óliver Torres jugará la próxima temporada en el Oporto, regresando al club en el que ya estuvo hace dos años en calidad de cedido. En esta ocasión, se ha especulado con diferentes tipos de contratos que podían desvincular a Óliver del Atlético de Madrid, pero finalmente el canterano seguirá pertenciendo al club rojiblanco. Eso sí, la cesión tendrá diferentes detalles poco comunes en estos casos.

A pesar de que el Atlético apenas ha dado datos acerca de la cesión, esta será de una temporada y media en el club luso. De esta forma, Óliver jugará en el Oporto hasta diciembre de 2017. Una cesión poco común, pero que se ha hecho efectiva despúes de que los portugueses hayan pagado entorno a 2 millones de euros por este año y medio. A su vez, el Oporto se guarda una opción de compra por el centrocampista de Navalmoral de la Mata que estaría entorno a los 20 millones de euros, por lo que Óliver podría haber vivido sus últimos días en el club rojiblanco.

Esto deja más que despejada la rampa de salida del Atlético de Madrid, que andaba apurado en este tramo final del mercado de fichajes. A la salida de Óliver al Oporto se ha unido en la misma mañana la de Manquillo al Sunderland. De esta forma, la cesión de Diogo Jota, que también podría recalar en el mismo equipo que Óliver, podría hacerse oficial en las próximas horas. Quien no tiene tan claro su futuro es Héctor Hernández, que ha seguido entrenando en los últimos días con el Atlético de Madrid pero cuya continuidad en el equipo rojiblanco no parece favorable. En cualquier caso, el club sigue aligerando la plantilla a menos de una semana de que se cierre el mercado.