"Otro día más en la oficina", habrá pensado Carrasco cuando ha sido sustituido por Saúl poco antes del final del encuentro. Y es que, de nuevo, ha abierto la lata y ha sido el único que ha podido, gracias a él el Atleti se ha apuntado los tres puntos en un ambiente hostil y frío y sale de la tercera jornada invicto y líder en Champions y Liga, poco más que decir la verda

El dato de Carrasco refleja enormemente el cambio de rol que está teniendo este año con Simeone y el once: el año pasado anotó cinco goles en 43 encuentros, mientras que esta temporada solo ha necesitado 11 encuentros para alcanzar la misma cifra, cantidad que puede quedarse minúscula si sigue en este sublime estado de forma, intocable de momento para el Cholo.

El tanto ante el Rostov ha sido muy del belga, efectivo y solucionador. Griezmann, caído en la banda derecha, abrió para Juanfran, el lateral español la colgó para un Fernando Torres que no llegó a impactar bien la pelota y cuando el cuero iba a irse para el lateral, sin ni siquiera dejarla caer Yannick la empalaba con la pierna izquierda y reventaba el arco de Dzhanaev con un tiro potente y colocado a su derecha.

Así ganó el Atlético en Rusia, de nuevo con un gol salvador de Carrasco. Está en ese estado de forma en el que no le da vergüenza ninguna intentarlo todo, ser egoísta, pues posee una confianza en sí mismo brutal, un jugador que está totalmente enchufado y que quiere hacer lo imposible. El mejor ejemplo está en el minuto en el que ha sido sustituido, el 89'. Si se miran los últimos 20 minutos ya de su encuentro, se pueden ver jugadas y algunos movimientos impropios para un jugador que lleva más de una hora corriendo y trabajando como él. Pero además de su aportación sublime en ataque, esta temporada Carrasco ayuda en defensa a Filipe y se doblan en múltiples ocasiones como hace cualquiera cuando es niño en el patio del colegio con su mejor amigo.

En el horizonte ya el Sevilla este domingo a las 16:15 en el Sánchez-Pizjuán, encuentro en el que el belga pinta a titular de nuevo y en el que, si vuelve a tener su tarde, el Atleti saldrá a por todas y él tendrá con Nasri un bonito duelo particular por ver quién pone más ‘picante’ en el ataque de sus equipos.