Ambiente festivo el vivido a orillas del Manzanares, una jornada muy familiar, favorecida por el buen tiempo y el horario del partido, para que los casi 50.000 espectadores que poblaban las gradas, con un elevado porcentaje infantil, disfrutasen de la victoria del equipo local.
El partido se inició con un claro dominio rojiblanco, los pupilos del Cholo salieron con ímpetu a por los tres puntos, aunque nada más iniciarse el partido, ya se vieron alterados los planes del técnico argentino, pues tuvo que sustituir a Vrsaljko, que se retiró lesionado, dando entrada a Juanfran en la banda derecha.
A pesar de tener mayor posesión de balón y dominar claramente el juego, los rojiblancos no conseguian materializar ninguna ocasión.
Los de Sampaoli, se veian superados por el juego de los atléticos, pero el gol se resistia, y no llegó hasta el minuto 36, cuando Diego Godín cabeceó al fondo de la porteria un balón centrado por Antoine Griezmann.
Se llegó al descanso con el solitario gol de Godín en el marcador, tras la reanudación, tuvo una clarisima ocasión Griezmann de aumentar el resultado, pero su disparo se marchó desviado.
Diez minutos después el ariete galo remató un libre directo de forma imparable, batiendo a Sergio Rico de forma espectacular.
Tras el segundo gol del Atleti, el Cholo decidió dar minutos de juego a Fernando Torres, que saltó al terreno de juego en lugar de Kevin Gameiro, el delantero fuenlabreño fue recibido con una gran ovación por parte del público en su retorno a los terrenos de juego, después del susto que supuso su lesión en Riazor.
Aun faltaba un último tanto del Atleti, Koke marcó el tercero a falta de un cuarto de hora para que se completase el tiempo reglamentario, para deleite de la hinchada que lo aclamó tras la celebración.
Cerca del final llegó el único tanto visitante, a cargo de Joaquin Correa, pero poco podían hacer los sevillistas salvo maquillar un poco el resultado. Victoria contundente de los atléticos para recortar distancias en la lucha por el tercer puesto de LaLiga.
