Antoine Griezmann volvió a dar los 3 puntos al Atlético de Madrid. Esta vez fue contra un duro Espanyol, el cual ya empató en el partido de la primera vuelta en el Calderón. Un saque de banda en largo de Giménez propició el gol, el cual llegó a las botas de Saúl tras una serie de rechaces. Este disparó, propiciando el rechace que caería en las botas del galo. La estrella francesa conectaría una volea de primeras, que iba dirigida al palo del portero, quien no pudo evitar el gol del rojiblanco.

Tras acabar el partido, Antoine atendió a los medios de comunicación, pero estuvo muy poco tiempo ya que, tras hablar del partido fue ser preguntado por su futuro, algo que le molesta bastante, ya que el periodista deja en el aire que el jugador francés no aclara su futuro y se deja querer. Con esto dio por concluida su comparecencia y dejó tirado al periodista.

Sabíamos que íbamos a sufrir. Es un equipo fuerte en casa. Lo hemos intentado hasta el final y luego, con el 0-1, hemos aguantado el resultado”, dijo el delantero rojiblanco al ser preguntado por el choque.

"Es un equipo fuerte en casa. Lo hemos intentado hasta el final y luego, con el 0-1, hemos aguantado el resultado”

Además, el francés dijo que “con tantos partidos, es normal que haya algunos partidos en los que cuesta más. Lo importante eran los tres puntos”. Además, añadió que "ahora tenemos que pensar en el Villarreal”. Después se produjo el asunto. Cuando el periodista le preguntó por su futuro, sin dejarle terminar le dio una palmada en el brazo y acto seguido dijo “no quiero hablar más” y se marchó.

Una anécdota curiosa tras un partido en el que una vez más fue salvador para los de Simeone y que los permite seguir una semana más en la tercera plaza, con un Sevilla que está muy cerca y una recta final que puede pesar con las semifinales de Champions.

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Sobre el autor
Javier Lumbreras Rey
Fútbol. Periodismo en la Universidad Complutense