El Atlético de la era Simeone tiene una consigna que no se negocia, el esfuerzo. No importa el minuto de juego, la posición del jugador, o incluso que se trate de la estrella del equipo. Todos se dejan el alma en cada jugada, en cada balón dividido, y eso es lo que marca la diferencia. Gracias al trabajo de todos, los colchoneros son, una vez más, el conjunto menos goleado.

Los pupilos del Cholo sólo han recibido 24 goles esta campaña y se encuentran por delante de su próximo rival, el Villarreal, como los que menos goles han cedido. El Submarino amarillo ha tenido que recoger el balón de dentro de la portería en tres ocasiones más que los rojiblancos. En los dos equipos, los porteros han tenido mucho que ver. En el Villarreal destacó Sergio Asenjo hasta que se lesionó. En el Atlético hay un gigante esloveno que cubre toda la portería y no permite a los rivales cantar gol.

El mismo Oblak, que lidera la lucha por el Zamora, destacó la importancia de todos sus compañeros: “Todos los jugadores somos importantes y hacemos un gran esfuerzo para ayudar al equipo”. Y es que sin la ayuda de todos y cada uno de los que saltan al terreno de juego, los guarismos que posee serían inimaginables. Tras la victoria por 0-1 ante el Espanyol aseguraba que “tanto el gol de Griezmann, como mi parada, como un robo de balón en mitad de campo que desde fuera no se ve tan importante, todo es importante y suma”.

“Todos los jugadores somos importantes y hacemos un gran esfuerzo para ayudar al equipo”

Jan Oblak entrenando / Foto: Atlético de Madrid
Jan Oblak entrenando / Foto: Atlético de Madrid

El buen estado de forma que están viviendo los centrales es uno de los grandes motivos de la situación que se está respirando en la orilla del Manzanares. Diego Godín, el capitán de la defensa, el fijo en la zaga colchonera, vive una juventud eterna. Parece no cansarse nunca. Anticipa las jugadas rivales. Y con su experiencia, corrige a su acompañante, lo que hace mejorar a su vez a Savic, a Giménez y a Lucas. El montenegrino está llevando a cabo una temporada impresionante. Para creerse la edad de Savic hay que mirarle la partida de nacimiento, y es que ni por su aspecto ni su experiencia, nadie diría que tiene sólo 26 años. Se muestra rápido en la anticipación, tiene una visión prodigiosa y entiende el juego como pocos. Por su parte, Giménez ha mostrado su versatilidad jugando en el centro del campo, echando una mano en la recuperación; y en el lateral ante el Espanyol, donde mostró su velocidad y, que a pesar de no ser su puesto natural, siempre cumple con creces lo que se le exige. Lucas está creciendo mucho como jugador y ganando experiencia. Trabaja donde le ponga Simeone, ya sea en el lateral o de central.

Diego Godín despeja un centro frente al Leicester / Foto: Daniel Nieto
Diego Godín despeja un centro frente al Leicester / Foto: Daniel Nieto

Pero no sólo los centrales están en un estado de forma increíble, sino que Filipe Luis está haciendo una de las mejores temporadas de su carrera. En defensa es inexpugnable. La banda izquierda está protegida por un auténtico correcaminos que evita los centros rivales. Además, se prodiga constantemente en ataque. Es un cuchillo bien afilado que destroza las defensas rivales. En el otro costado de la zaga hay un hombre que ha hecho lo que parecía imposible, quitar la titularidad a Juanfran. Vrsaljko empezó dejando dudas acerca de su capacidad defensiva pero ha demostrado ser un seguro atrás. Y cuando ataca, pone mucha velocidad por la banda derecha y centros muy precisos.

Filipe Luis avanza con el esférico / Foto: Alex Ricoller
Filipe Luis avanza con el esférico / Foto: Alex Ricoller

Los números que se reflejan en las estadísticas son posibles gracias a la actitud de Griezmann que, a pesar de ser la estrella del equipo, la cara visible de los goles, la persona sobre la que están puestos los focos constantemente, es el primero en presionar y en bajar a defender hasta el banderín del córner, si hace falta. Esta solidez defensiva se debe a los jugadores del centro del campo. A los Carrasco y Koke, que echan una mano a los laterales para que no sufran. O a los Saúl, Gaitán y Thomas cuando les toca hacer lo mismo. A Gabi, que es el líder de la medular. Es el que más espacio ocupa en el campo, no hay un sitio en el que no aparezca la sombra del capitán rojiblanco.

Pero no sólo a ellos, sino también a Miguel Ángel Moyá. El cancerbero suplente cubrió el puesto de Oblak cuando éste se lesionó, precisamente, ante su próximo rival, el Villarreal. Moyá tuvo el papel de titular durante 72 días. Ha disputado nueve partidos en la Liga y ha tenido que recoger el balón de las redes en seis ocasiones. En esos partidos ha dejado grandes actuaciones y la seguridad de que el Atlético cuenta con un portero excelente por si se lesiona Oblak. Además, amén de estas intervenciones, se ha ganado una renovación de contrato por un año más. Gracias a la unidad del equipo, a que luchan como hermanos, al esfuerzo que hacen los jugadores, al coraje y el corazón que derrochan... llevan encajados tres goles en los últimos nueve partidos y son el equipo menos goleado de la Liga.