Complicado entender ya un Atleti sin Saúl Ñiguez. El canterano es ya una columna más del equipo de Simeone y ha completado otra gran campaña. A pesar de sus 23 años,  acaba de completar su tercera temporada cobrando, cada vez más, una importancia mayúscula. La 2016/2017 no trae títulos, pero si un paso más en la gran trayectoria de Saúl. Asentado, más si cabe, en el equipo, el ilicitano ha vuelto a dar otro golpe sobre la mesa y el técnico argentino no concibe ya un once sin el joven centrocampista.

Saúl Ñiguez acaba la temporada con 53 partidos jugados, 33 partidos en liga, 12 de Champions y 8 de Copa del Rey. 4007 minutos en las jóvenes piernas de un chaval con alma de veterano.  47 de todos esos partidos han sido desde el inicio lo que recalca la importancia existente en el 8 rojiblanco. Con ello, 9 tantos, igualando su mejor registro (la temporada pasada). Mérito mayor en una temporada donde los goles estuvieron tan repartidos. 12 amarillas y 3 asistencias completan su registro.

Más allá de los números y las estadísticas, Saúl termina la campaña 2016/2017 con grandes sensaciones. De menos a más, acabando la temporada en un estado de forma excelente. El centrocampista fue la fuerza y la potencia del equipo cuando más flojeaban las piernas en la recta final.  Un filón, un motor, un incombustible. Un comodín.

Sin premio, con reconocimiento

El pequeño de la familia Ñiguez acaba la temporada sin títulos ni consecuciones. Apeado su hermano mayor con el Alcoyano  de cualquier intento de ascenso en Segunda B, Aarón lleva la esperanza de la familia para esta temporada de una posible celebración con el Tenerife. No obstante, Saúl no le suele ser reconocido, trofeos a parte, sus labores y su trabajo. Tema Selección Española por descontado, sería una injusticia no “celebrar” otra gran temporada del canterano en el Atleti.

Parecía un año más complicado aún. Un Koke más centrado junto a Gabi en un inicio, la irrupción de Carrasco o la llegada de Gaitán. Pero para el canterano todo se ha quedado pequeño. Por el exterior, por el centro, Saúl ha sido primordial pese a todo y ha vuelto a ser la navaja multiusos de Simeone. Defiende, ataca, roba, crea. Le costó llegar a su mejor nivel, tuvo unas fases irregulares, pero acabó por ser clave.

El hombre de los goles increíbles… y de cabeza

El registro goleador de Saúl ha igualado su mejor marca, la de la pasada campaña, pero con un curioso modus operandi. El ilicitano ha dejado una huella clara en sus goles, 9 en total. Dejando a un lado el gol desde los once metros ante el Guijuelo en Copa del Rey, los goles del canterano han sido de cabeza o de gran ejecución artística. La estela goleadora de Saúl nos deja golazos de bella factura y grandes remates de cabeza.

En Liga acabó anotando cuatro goles, en cuatro partidos pero a tan solo dos rivales. Las Palmas y Eibar fueron las victimas de Saúl en la Liga Santander 16/17. Dos remates de cabeza en la primera vuelta, y dos golazos en la vuelta en el Calderón. Ante los canarios quitando las telarañas, ante los de Mendilibar ajustando desde fuera del área tras una dejada de Torres.

En Champions, la competición donde más se luce el 8 rojiblanco, tuvo también el mismo sello que en liga. Dos goles de cabeza a Leicester y Real Madrid, este último que invitó a una hipotética remontada, y dos golazos para el recuerdo de la competición ante Leverkusen y PSV. En Holanda con una volea preciosa y en Alemania con una jugada y una finalización que hizo recordar su golazo ante el Bayern la pasada temporada. Sea como fuere,  protagonista en los tantos Saúl Ñiguez.