El Atlético de Madrid iniciaba la Liga ante un recién ascendido Girona, por lo que, en un principio, el conjunto rojiblanco era favorito para hacerse con la victoria.

El partido comenzó con dominio absoluto del Girona. Los de Pablo Machín se estrenaban, por primera vez en la historia del club catalán, en la máxima categoría del fútbol español y querían hacerlo por todo lo alto. El club catalán era el encargado de crear las ocasiones y manejar, a su antojo, la posesión de balón.

La posesión y ocasiones no tardarían en verse reflejadas sobre el marcador. Corría el minuto 22 cuando, Christian Stuani, de cabeza, abrió el marcador. El uruguayo hizo historia en el Girona FC ya que, ha sido el encargado de anotar el primer gol del club en la división de oro de fútbol en España. Así mismo, Stuani, tres minutos más tarde, puso tierra de por medio logrando el segundo tanto para el equipo catalán.

Los de Simeone, a pesar de la gran pretemporada que han realizado, se encontraban perdidos sobre el césped de Montilivi. La desorganización y falta de coordinación entre los pupilos del técnico argentino hicieron que el Girona se encontrara muy cómodo durante todo el partido. Tanto que, hasta el minuto 34, el Atlético de Madrid no logró su primer disparo a puerta.

En la segunda parte, como viene siendo habitual, el Atlético de Madrid salió con energía renovadas. Comenzó a buscar el gol a la desesperada, sin encontrarlo. Aunque los jugadores del Atleti comenzaban a crear ocasiones, no lograban dominar el partido.

En el minuto 67, una entrada de Iraizoz sobre Griezmann hizo que el francés se fuera al suelo dentro del área. El colegiado entendió que el delantero rojiblanco había caído intencionadamente, sacándole así cartulina amarilla. Segundos más tardes, tras un intercambio de palabras, Martínez Munuera mostró la roja al internacional francés.

Para bien o para mal, esta acción condicionó aún más el partido para el Atlético de Madrid. Tras la expulsión de Griezmann, segundo cambio en el conjunto dirigido por Simeone. Salió Gabi para dar paso a Nico Gaitán. Y cuatro minutos más tarde, en el 73, tercer y último cambio: Torres por Vietto.

El Atlético de Madrid seguía buscando el gol. En especial, Correa, que saltó al campo como revulsivo en el minuto 58. Tras disparar varias veces sin lograr materializar, una jugada individual entorno al minuto 78 hizo al Atlético de Madrid meterse en el partido. El delantero argentino, con un disparo por toda la escuadra, logró batir a Iraizoz. Correa fue el encargado de, en cuanto a goles, cerrar la temporada 2016/17 y él mismo ha sido quien ha abierto la 2017/18.

Desde ese momento, el Girona trató de buscar el gol que sentenciara el encuentro. Pero Oblak, tan brillante como siempre, hizo inútil cualquier intento de gol por parte de los hombres de Pablo Machín. Una excelente intervención del esloveno en el minuto 82 permitía al Atlético de Madrid seguir pensando, como mínimo, en el empate.

El segundo gol del Atlético de Madrid llegó a falta de cinco minutos para el final. Un servicio de Koke y un remate de Giménez devolvieron el empate al marcador. Tras esto, comenzaría la réplica del Girona. No obstante, las brillantes intervenciones de Oblak impidieron que el club catalán lograra el tercero.

Poco a poco iba muriendo un partido dominado, de principio a fin, por el Girona FC. Un gran debut del conjunto catalán pone contra las cuerdas al Atlético de Madrid que, gracias a una jugada individual de Correa y un cabezazo de Giménez, ha conseguido un punto a la heroica en el Estadio Municipal de Montilivi.

A falta de una semana para la segunda cita liguera, ante Las Palmas, Simeone y sus jugadores aún tienen mucho trabajo por delante para dar continuidad al buen momento que vivió el Atlético de Madrid la pasada temporada.