El Atlético de Madrid visitaba territorio franco, el estadio de Ipurua donde no conoce la derrota desde que ambos clubes se enfrentan en la máxima categoría del fútbol nacional.

En una tarde muy poco agradable para disputar un partido por el frío y la lluvia que no cesó en los 90 minutos, pero con las gradas repletas, los 22 protagonistas hacían aparición en el terreno de juego. Simeone, ante la importante baja de Costa, colocaba en el ataque a la pareja francesa Gameiro-Griezmann, en el centro del campo volvía Saúl y en la defensa central los uruguayos Godín y Giménez protegerían la portería de Oblak.

Como se advertía en la previa, el de Eibar no iba a ser un partido fácil de superar, a pesar del buen momento en el que llegaban los del Cholo. Con dos mitades muy diferentes, una para cada equipo, los madrileños se llevaron tres puntos de oro para seguir siendo una posible opción al título de Liga.

PRIMERA PARTE

Los primeros 45 minutos estuvieron marcados por la superioridad en el campo de los rojiblancos, sobre todo durante los primeros 25 minutos, fue una de las mejores primeras partes que se le recuerdan. Tras ellos el choque pasó a un equilibrio  pero siempre bajo control colchonero.

El duelo comenzaba con un Eibar volcado al ataque, con el ex canterano atlético Iván Alejo que iba a protagonizar los dos primeros córners de los vascos. Pero solo fue un espejismo de dos minutos, pues llegado el minuto cuatro el Atlético iba a tener su primera oportunidad. Una jugada que comenzaba en la banda derecha con Vrsaljko que ponía el balón a Griezmann para Correa y a la que Gameiro no llegaba.

Una y otra vez los madrileños se acercaban a la portería rival, Correa, Gameiro intentaban sin suerte que el balón acabase en la red de Dimitrovic y adelantar a los suyos. Vrsaljko volvió a demostrar que disfruta atacando en las zagas abiertas y de él nació la ocasión que Koke mandó a lo alto de la portería rival.

Pasaban dos minutos del cuarto del partido cuando la dupla francesa hacía de las suyas. Con su particular puente de los franceses, Gameiro aprovechaba un pase raso de Griezmann para hacer poner al Atlético por delante en el marcador. Tras el gol, el equipo armero intentaba poner en tablas el partido por medio de más saques de esquina que la zaga defensiva del Atleti despejaba con mucha facilidad, como viene siendo habitual.

Así se llegaba al descanso, ganando por la mínima el conjunto rojiblanco gracias a la conexión Griezmann-Gameiro.

SEGUNDA PARTE

Tras la vuelta del descanso, el Atlético parecía desaparecido ante un Eibar que revivió. El equipo armero recuperó protagonismo en el campo pero sin generar grandes ocasiones. Con muchas ganas, los guipuzcoanos cercaron a su rival en su área haciendo que el juego se centrara en esa zona del césped. Tal fue el asedio que a punto estuvo Godín de introducirse el balón en su portería.

Simeone dio salida a Carrasco para poner el cerrojo en las bandas y atacar a los laterales. Él mismo encarriló lo que podría haber sido el 0-2 y la sentencia del partido. Con un pase a Griezmann cuyo derechazo no pudo superar al portero armero. Ya en los minutos finales con una renuncia total del ataque de los visitantes, los locales tuvieron el empate con una ocasión de Paulo Oliveira cuyo cabezazo salió muy centrado para que, afortunadamente, Oblak pudiese pararlo. Precisamente Oblak volvió a salvar a los suyos al despejar un potente disparo del japonés Inui. Así terminó el sufrido 0-1 que cosechó el Atlético de Madrid con el que sigue sumando victorias en territorio blaugrana. 

Con este nuevo triunfo, el Atlético se afianza más en la segunda posición y cierra la primera vuelta con 42 puntos y a seis del Barcelona, a expensas de lo que haga mañana, y mete presión al Valencia.

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