Cuando llegó el Cholo Simeone al banquillo rojiblanco, su principal objetivo fue armar al equipo desde atrás, desde la defensa. Sabedor que, si recibía pocos goles, y con los grandes delanteros que siempre ha contado, iba a ganar muchos partidos. Y vaya si lo ha conseguido. Para esa forma de juego se antojaba fundamental contar con un portero de garantías. Llegó un joven belga cedido por el Chelsea llamado Thibaut Courtois y en el Calderón se quedaron maravillados por las grandes cualidades que ese espigado arquero atesoraba. Con Courtois el Atlético lo consiguió casi todo, una Liga, una Copa del Rey, la Supercopa de Europa e incluso llegar a la final de la Champions League. Pero el belga nunca llegó a pertenecer al Atleti y su marcha al Chelsea parecía irremplazable para los colchoneros.

En el verano de 2014, el Atlético fichó del Benfica a un guardameta que ya había destacado tanto en la Liga Portuguesa como en la Europa League, por eso se convirtió en el portero más caro de la liga española (16 millones) y ha sido en Madrid donde ha logrado su mejor nivel. Le costó arrancar y ganarse el puesto en el once, pero a partir de una lesión de Moyá, Oblak se convirtió en indiscutible para Simeone y sus números le avalan.

En su primera temporada como titular en la portería del Atlético de Madrid, Jan Oblak consiguió ser el portero menos goleado logrando además un zamora de récord pues el conjunto rojiblanco tan solo recibió 18 goles igualando así la marca que poseía el Deportivo de La Coruña en los años 90 con Liaño de portero. También en la máxima competición continental brilló Oblak, pues actuaciones magníficas como aquella semifinal en Múnich donde detuvo un penalti a Lewandoski, sirvieron para que el Atleti accediera a su segunda final de Champions en apenas dos años. La temporada pasada ni siquiera una inoportuna lesión, que le mantuvo apartado de los terrenos de juego unos meses, evitó que el cancerbero colchonero revalidara su título como menos goleado de la competición doméstica, esta vez con 27 goles encajados, 10 menos que su competidor más cercano, Ter Stegen del F.C Barcelona.

FOTO: Ángel Gutiérrez (Atlético de Madrid)
FOTO: Ángel Gutiérrez (Atlético de Madrid)

Esta temporada, el Atlético de Madrid como club ha sufrido un cambio de estadio e incluso de escudo. Eso sí, lo que sigue sin cambiar es el muro con el que cuenta bajo los palos. En su cuarta temporada en la capital española, Oblak mantiene vivo el sueño de conseguir la Liga para el Atlético de Madrid, terminando la primera vuelta como portero menos goleado con tan solo ocho goles encajados, una cifra de récord que solo la supera los seis que recibió Liaño en la 93-94 e igualan los ocho tantos que Oblak había recibido en la temporada 15-16.

Los números de Jan Oblak son una auténtica locura y es que cuenta con el mayor porcentaje de partidos con la portería a cero de toda la historia de la Liga con un 59,2 % superando así a otros guardametas como su predecesor Courtois, Liaño o Víctor Valdés.

Interés de los grandes de Europa

Estos tremendos datos que atesora el guardameta esloveno no están pasando desapercibidos para los grandes clubes de Europa que suspiran por hacerse con sus servicios el próximo verano. Según cuenta el Diario AS, el PSG estaría dispuesto a abonar la cláusula de rescisión que actualmente es de 100 millones de euros y conseguir así la pieza que le falta para completar su faraónico proyecto de tener el mejor equipo del mundo. También en los últimos días ha sonado con fuerza el interés del Liverpool por contratar a Oblak con el dinero que ha recibido en este mercado invernal por la venta de Coutinho al Barça. Sin embargo, en el Atlético no quieren ni hablar de una posible marcha de unos de sus jugadores mas importantes, eso sí como el mismo Oblak reconoció el pasado sábado al finalizar el partido en Eibar todavía no le han hecho una oferta de renovación. El Atlético tiene de aquí a junio para realizar un esfuerzo importante por el cotizado portero si no quiere perder al muro mas deseado de Europa.