Con aparente cojera, Diego Costa se retiró del terreno de juego en el minuto 61 durante el choque de Liga disputado entre el Girona y el Atlético de Madrid. Al parecer, el brasileño había sentido molestias musculares en la zona del aductor y Simeone decidió no forzar. Pendiente de evolución, Costa hizo saltar todas las alarmas tras el resultado final; empate a uno en el Metropolitano tras la derrota contra el Sevilla el pasado martes en Copa, y con la vuelta en el Pizjuán la próxima semana. Esta misma mañana el club ha comunicado el alcance de la lesión; diez días de baja para que la recién llegada estrella del Atlético se recupere de una elongación en su musculatura aductora.

Con todo ello, el Atlético tendrá que jugar sus cartas sin un as bajo la manga. Tras la llegada del hispano-brasileño, un soplo de aire fresco parecía haber reanimado a un Atlético que ofrecía dudas antes del periodo de descanso navideño. A pesar del resultado en contra y la necesidad de hacer dos tantos sin encajar, el Atlético viajará a Sevilla el martes con el objetivo de dar la vuelta a la eliminatoria, y la baja de Costa será una gran ausencia entre las filas de Simeone.

Diego Costa tuvo la oportunidad de volver a vestir la elástica rojiblanca en el primer choque del año, frente al Getafe. Desde entonces, ha disfrutado de minutos en cuatro de los cinco partidos disputados (uno de ellos se ausentó por amonestación) y ya ha sido el protagonista de tres goles en lo que va de año; con el último adelantó el marcador frente al Sevilla en la pasada jornada de Copa del Rey. A partir de esta jornada, el brasileño tendrá que cumplir los diez días estimados de reposo y seguro se perderá la vuelta de Copa ante el Sevilla y el próximo partido de Liga ante Las Palmas.

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