“Tengo la sensación de que perdí el partido yo”. Esas fueron las palabras de Diego Pablo Simeone en la sala de prensa del estadio de La Cerámica. El Atlético de Madrid acababa de caer derrotado frente al Villarreal y con este resultado decía prácticamente adiós a la Liga y su entrenador, el Cholo Simeone sorprendía a todos con unas declaraciones poco habituales en él. El míster rojiblanco se culpó de la derrota declarando que sus jugadores “hicieron un esfuerzo enorme y yo no les pude ayudar con mis decisiones”. Pero ¿a qué decisiones se refería Simeone?

“Hicieron un esfuerzo enorme y yo no les pude ayudar con mis decisiones”El Cholo no quiso ir más allá y ante la insistencia de los periodistas sobre que errores había cometido para sentirse así, el entrenador respondió: “me equivoqué en cosas puntuales del partido”.

Los cambios de la discordia

Seguramente fue esta la razón por la que el Cholo se responsabilizó de la derrota. El Atlético salió prácticamente con su once de gala, salvo la entrada de Lucas por Filipe Luis lesionado de larga duración, y con un equipo descansado pues tan solo 6 jugadores repitieron respecto al equipo titular que puso en liza en Moscú y de esos seis, cinco de ellos se sitúan por debajo de los 26 años.

El Atleti parecía tener el partido controlado, con 0-1 el marcador y sin apenas sufrir sobresaltos Simeone decidió dar entrada a Vitolo por Correa un cambio habitual de hombre por hombre para intentar aguantar más el balón y mejorar la circulación del juego sin perder verticalidad arriba. Corría el minuto 81 y ya el cansancio comenzaba a aparecer en los rojiblancos que venían de un largo viaje y tras disputar un partido hace tan solo 2 días antes por lo que el Cholo pensó que lo mejor era dar entrada a Gabi para asegurar el resultado y llevarse una nueva victoria por 0-1 como otras tantas veces había ocurrido. Sin embargo, esta vez fue diferente, el capitán entró sustituyendo a Griezmann, que no tuvo su mejor día y que minutos antes había tenido una clara ocasión para matar el partido, para darle mayor consistencia al equipo, pero poco pudo hacer el 14 cuando 68 segundos después de ingresar en el césped Ünal, de cabeza, ponía las tablas en el marcador y todo el plan se vino abajo.

Tras el gol del turco el plan rojiblanco cambió y fue entonces cuando el Cholo metió a Torres por Koke para buscar, ya a la desesperada, una victoria que le siguiera permitiendo luchar por el título, aunque ya toda modificación fue en vano, el ímpetu amarillo no había quién lo frenara y el Atlético se vio superado en todas sus líneas. El empate parecía inevitable hasta que, en otra jugada a balón parado, de nuevo Enes Ünal mandaba el balón al fondo de las mallas ante la incrédula mirada de Griezmann desde el banco y de Simeone consciente de que esta vez sus cambios no sirvieron para nada.