Los grandes entrenadores del fútbol mundial dicen que un gran equipo se contruye desde atrás hacia adelante. Para tener unos buenos resultados es importantísimo que el equipo encaje pocos goles. Como ejemplo de esta filosofía se encuentra el Atlético de Madrid de Simeone. Desde que el técnico argentino llegó a club, el club madrileño ha basado su juego en encajar poco. Y, como se ha podido observar, le ha dado fantásticos resultados. La portería del Calderón, desde que se practica el cholismo, siempre ha estado ocupada por porteros segurísimos como  Coutois u Oblak.

El Real Betis Balompié, hasta la llegada de Antonio Adán, no fue capaz de encontrar a su guardián de la portería. Muchos han sido los candidatos desde la primera etapa del técnico Pepe Mel hasta la temporada pasada, en la que Adán se reafirmó como ese guardián de los palos que el Real Betis llevaba buscando desde hacía unas campañas.

En la temporada 2011/2012 los porteros que tenía el Real Betis en su plantilla tenían actuaciones seguras y buenas, pero ninguno era un "porterazo". Los porteros eran Casto e Iñaki Goitia. Esa temporada el Real Betis disputaba la Segunda División española. El portero de 1,88 metros, Iñaki Goitia, era el titular en los partidos de Liga. Casto hacía diversas intervenciones, pero el protagonismo lo tenía el de 1,88. Adrián San Miguel, portero del equipo filial del club heliopolitano, también intervino en entrenamientos y algunas convocatorias.

Sería en la siguiente campaña, la 2012/2013, cuando el canterano se convirtió en titular y parecía ser el portero del Betis. La misión de encontrar a un buen portero de futuro, que llevaba años en marcha sin éxito, parecía completada. A partir del mercado invernal el Real Betis Balompié debía empezar las negociaciones de renovación del canterano. Esto no se consiguió, a pesar de que Adrián quería jugar en su equipo, el Real Betis Balompié. En junio de 2013 Adrián San Miguel se despidió de su club, en el que, hasta ese momento, había pasado 16 años de su vida. Todo lo que sabía de defender el arco se lo enseñó el Real Betis. Todo lo que sabía de la vida lo había aprendido con la camiseta del Real Betis Balompié. Su sueño de triunfar con el Real Betis no fue posible. Adrián marchó gratis al West Ham United, donde, actualmente, es uno  de los pilares del club londinense.

El Betis seguía con su misión: encontar un portero que defendiese la portería del Villamarín al nivel que la afición demandaba. En mayo de 2013 llegaba el siguiente candidato. El cancerbero danés, internacional con su selección, Andersen llegaba al Betis libre y firmaba por dos temporadas. El portero, procedente del Évian francés, no dio el rendimiento esperado, ni siquiera se acercó. En el mercado invernal de la 2013/2014 el club helipolitano lo cedió al Go Ahead Eagles de la Eredivisie. Tras volver del préstamo se marchó libre al equipo de su ciudad, el FC Copenhague. El candidato siguiente al danés fue Guillermo Sara, procedente del Atlético Rafaela argentino. Al guardameta argentino le costó la adaptación al fútbol europeo. Actualmente juega en el Boca Juniors.

En invierno del ejercicio 2013/2014 el Betis incorporaba al canterano del Real Madrid Antonio Adán. El jugador venía de probar suerte en el fútbol italiano, concretamente en el Cagliari. Vino sin encontrarla. Afortunadamente para el Real Betis la suerte la encontró en Sevilla y, con su llegada, el Betis encontró lo que estaba buscando: un portero comprometido y de nivel para el arco verdiblanco. El portero madrileño demostró compromiso con el club sevillano estando dispuesto a firmar cuando el Betis aún estaba en la segunda categoría. Desde entonces es el titular indiscutible en la portería de Villamarín. Desde la 2014/2015 al madrileño lo acompaña un vigués: Dani Giménez, jugador que llegó del Alcorcón aceptando el rol de segundo portero.

La secretaría técnica del Real Betis Balompié cumplió su objetivo: encontrar al portero del Betis. Vino Adán y con él el Betis terminó un proyecto que no conseguía concluir. En la 2015/2016, junto al delantero canario Rubén Castro, se convirtió en uno de los pilares del club para conseguir la permanencia.

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