No por ser poco común es menos importante. El Real Betis, un club histórico en Primera División, se medirá este sábado a las 17:30 horas en tierras suizas a un país como Catar. Y vaya si el encuentro se antoja importante porque las sensaciones verdiblancas van a menos tras el gran arranque de pretemporada donde las victorias no cabían en una mano. La goleada encajada en Francia ante el Montpellier seguida de la pobre actuación en el Trofeo Colombino sin poder marcar ni un solo tanto han sembrado dudas que no el pánico en una afición ilusionada más que nunca con esta temporada. Es por ello que toca volver a la senda de la victoria. No queda otra porque un 'monstruo' llamado Barça está a la vuelta de la esquina.

El caso es que el verano está para ir corrigiendo errores, para ir de menos a más que al contrario. Gustavo Poyet pide tranquilidad a la parroquia verdiblanca, que sabe que su equipo ha pegado un bajón importante en los últimos compromisos. Son 10 partidos hasta la fecha, con dos mini-choques de 45 minutos jugados el pasado miércoles. Siete triunfos posee el cuadro andaluz, con ese empate en penaltis ante el Everton que terminaba con triunfo en la tanda. El Palo, Linense, Middelsbrough, Fulham, Werder Bremen, Everton y Sporting han sucumbido al sacrificio y, en determinados choques, buen juego del Real Betis

El problema es que a partir de ahí lo que ha venido no ha sido nada positivo. Lo primero fue una goleada ante el Montpellier, ex-equipo de Jonas Martin. Los franceses ganaban en casa por 3-0, con errores defensivos y una falta de llegada ofensiva preocupante. También es verdad, todo hay que decirlo, que el marcador fue más abultado de lo que se vio en el campo. Y lo siguiente ha sido el Trofeo Colombino, con Córdoba y Recreativo Huelva como adversarios. Uno de LaLiga 1|2|3 y otro de Segunda División B. Pues bien, los califales ganaban por 0-2 en 45 minutos a muchos titulares béticos. Y, por otra parte, el Decano igualaba sin goles un partido con el que sería campeón de su trofeo. Preocupante.

Quedan dos partidos más para completar una pretemporada exigente cargada de amistosos, con tres títulos veraniegos bajo el brazo pero con la sensación de que hay mucho que mejorar tanto atrás como delante. Catar será el próximo rival, un país con mucho dinero pero con no con demasiada tradición futbolera. Eso sí, sus resultados convencen pues son siete victorias con tres derrotas en los últimos 10 encuentros. Cifras que hacen pensar que el fútbol catarí está al alza. Aún así, la diferencia de calidad que debe existir entre estos dos contendientes debe ser notoria para imaginar que el Real Betis tiene motivos para sacar esta cita adelante.

Todos se suben al 'barco' 

Gustavo Poyet tiene a todos sus pupilos disponibles excepto a Sanabria, que no jugará más en esta pretemporada pero que también va en la lista para seguir tratándose allí. 21 convocados son los que ante Catar, primero, y este domingo ante el RB Leipzig, tendrán que que convencer al míster uruguayo. 'Yo tengo sitio' debe ser el lema. Adán, Dani Giménez, Manu Herrera, Piccini, Rafa Navarro, Pezzella, Mandi, Bruno, José Carlos, Álex Martínez, Durmisi, Petros, Jonas, Fabián, Felipe Gutiérrez, Hinojosa, Dani Ceballos, Cejudo, Nahuel, Musonda, Joaquín, Zozulya, Álex Alegría, Sanabria y Rubén Castro.

Cabe recordar que el partido finalmente no será televisado, a pesar de estar dentro del proyecto de La Liga World, por petición del combinado catarí que no quiere dar pistas a sus rivales en los amistosos de pretemporada. Así pues, penúltimo asalto de una 'batalla' que termina este domingo. La 'guerra' empezará la semana que viene en la Ciudad Condal ante el mayor de los 'guerreros'. Y Gustavo Poyet tiene aún mucho que Catar.

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Sobre el autor
José Manuel Gelo
1995. Periodismo en la US. Socio del Real Betis Balompié. Lo difícil se consigue, lo imposible se intenta