El Real Betis consigue ponerse por delante en la eliminatoria de dieciseisavos de la Copa del Rey ante un Deportivo que fue a ganar en todo momento, con mucha ímpetu. Sin embargo, los de Víctor Sánchez lograron suministrar el gol de Sanabria y viajarán el día 21 a A Coruña con la intención de agarrarse a este resultado, que deja poco lugar para posibles errores.

Víctor se encuentra en ese momento donde su intención es inculcar una filosofía de juego y establecer un sistema sólido con el que jugar cada partido. Una señal de identidad, algo que necesita la entidad verdiblanca. Pero para ello, el entrenador bético está haciendo que todos los jugadores se involucren y remen en la misma dirección. Por ello, las rotaciones, aunque con más aspectos negativos que positivos, esconden un claro deseo del entrenador.

Las rotaciones escondían un objetivo positivo

El deseo de Víctor Sánchez del Amo no es otro que hacer sentir importantes tanto a suplentes como a titulares. La unión en un equipo que necesita confianza es el primer paso. Con esa unión y confianza llega, como ayer, el gol de Sanabria y empezamos a ver el descaro y la calidad de los futbolistas que están en la plantilla verdiblanca.

Pocos entendieron al entrenador madrileño cuando dijo que no iba a tirar ninguna competición. Él, en realidad, quería hacer referencia a esto, a que cada competición debe cumplir su función y que tras cada partido se esconden muchas oportunidades de conseguir aspectos positivos para el vestuario. Es lo que necesitaba este Real Betis, aprovechar cada partido y cada entrenamiento.

El Real Betis debe lograr el pase en Riazor

Ahora falta rematar la faena en Riazor. Confiando en los mismos jugadores, en el mismo sistema. Porque el fútbol consiste en ser fiel a unas ideas, en tomarlas como propia y en confiar que el éxito se esconde tras esas ideas. Mejorar la imagen dada no será tarea complicada, ya que el equipo en el día de ayer mostró carencias en el centro del campo para controlar el partido y un cierto descontrol en casi todas sus líneas.

Sin duda alguna, el aspecto a destacar, más que centrarse en aspectos futbolísticos, es la actitud del equipo y la positividad que se esconde tras estas rotaciones. El Real Betis coge confianza de cara a sus siguientes compromisos ligueros. Dos de tres victorias para Víctor Sánchez del Amo que poco a poco inculca su filosofía en sus jugadores, que se ven activos y necesarios en el día a día del club.