El gol ha sido el gran ausente del encuentro vivido en el Benito Villamarín entre Real Betis y Sporting. Un gol que no ha llegado para ninguno de los dos equipos, y no precisamente por falta de ocasiones. Al menos en lo que respecta al equipo verdiblanco. Una falta de gol -y consecuentemente de victoria- que hacía que los jugadores de Heliópolis se marcharan descontentos y, como afirmaba su entrenador, “cabreados”: “Evidentemente no podemos estar contentos. Nuestra intención y objetivo era conseguir una victoria”.

En un partido “muy trabado”, como lo ha denominado el propio Víctor Sánchez  del Amo, el equipo no ha estado “lúcido a la hora de tener continuidad en el juego”. Un juego en el que ha penalizado, como se apuntaba anteriormente, la falta de dianas: “La falta de efectividad de cara a la portería contraria es lo que ha marcado la diferencia entre ganar y no hacerlo. A pesar de no tener un juego lúcido hemos rematado 24 veces. No hemos sido capaces de superar esas situaciones de juego trabado y de disputas ante un equipo que está en una situación complicada”.

"La falta de efectividad es lo que ha marcado la diferencia entre ganar y no hacerlo"Víctor intentaba sacar algo bueno del empate, pero, una y otra vez, el descontento y el enfado volvía a sus respuestas: “Me he cabreado al final en un par de jugadas donde hemos permitido al rival salir en transición cuando podíamos cortar la jugada. No podemos estar satisfechos por no haber sido capaces de materializar alguna ocasión que nos hubiera dado los 24 puntos que queríamos alcanzar hoy”.

Un enfado que también se ha vivido en las gradas, desde las cuales los aficionados béticos han despedido a sus jugadores entre pitidos. Situación, esta, que el técnico ve “normal” por el resultado, y, de alguna manera, sabía justificarlo: “Seguramente ha sido el partido en el que hemos hecho ocasiones muy claras, si hubiéramos conseguido meter una o dos la afición habría estado contento y lo hubiese celebrado. La diferencia de ese estado emocional es ganar o no hacerlo. Los primeros críticos somos nosotros, queremos hacer las cosas mucho mejor”.

Los jugadores

Un partido en el que, por otra parte, el empate no era la única sorpresa. La principal novedad llegaba cuando se hacía público el once inicial, en el que figuraba, junto a Rubén Castro, Zozulya. Los problemas arrastrados por Alegría durante la semana han llevado a Víctor a darle minutos al ucraniano. Un Víctor que no entiende porqué cosas así pillan por sorpresa: “Lo venimos diciendo, todos están trabajando muy bien durante la semana y nos demuestran que están preparados para competir”. Algo similar ha ocurrido con Brasanac, a quien su entrenador ha querido premiar por su “buen partido en el Calderón”

En definitiva, el madrileño está satisfecho con su plantilla: “Hay mucha igualdad en todos los puestos, los futbolistas están trabajando muy bien para dar lo mejor para el equipo”. No obstante, también sabe que “hacen falta jugadores de refuerzo”: “Tenemos que ajustarnos en dos posiciones”.

Los análisis, mejor más adelante

Preguntado sobre un posible análisis del equipo ahora que se acaba la primera parte de la competición, el madrileño lo tenía claro: “No me gusta hacer análisis en un momento de la temporada que no sirve para nada. Hay que jugar la segunda vuelta, no nos vamos a detener a hacer balances de resultados de la primera vuelta porque no nos va a servir para mejorar la preparación del próximo partido”. Añadiendo a esta reflexión que, hacer especulaciones sobre el final de temporada a estas alturas es “como tratar de adivinar el número de la lotería”: “Lo que podemos hacer es centrarnos en trabajar para ser mejores cada semana y que eso nos lleve lo más lejos posible”.

“Cuando termine la temporada podremos hacer un balance. Si hubiéramos ganado hoy estaríamos más contentos, pero igualmente no habría nada que celebrar ni hacer ningún balance", sentenciaba.

VAVEL Logo
Sobre el autor
Azahara Sanchez Perez
Graduada en Periodismo por la US y estudiante en el Máster de Periodismo Deportivo de la Cámara de Comercio de Sevilla.