En la noche de ayer, último día del mercado invernal, el Real Betis anunciaba a través de su web y de sus redes sociales oficiales que el jugador ucraniano Roman Zozulia iba a jugar en el Rayo Vallecano a modo de préstamo hasta el próximo 30 de junio.
Víctor Sánchez del Amo no contaba con el ucraniano, a pesar de que había jugado algunos minutos en los últimos partidos. El club pensó correcto una cesión para que el jugador tenga minutos. Se eligió al Rayo Vallecano, jugador de la Segunda División española.
El jugador llegaba hoy a la Ciudad Deportiva del club madrileño con la ilusión de empezar de cero en un nuevo equipo. Llegaba con ganas de ayudar al Rayo Vallecano a volver a Primera División.
A su llegada a las instalaciones ha sido increpado e insultado por algunos aficionados. Incluso han llegado a poner un pancarta en la que se podía leer "Vallekas no es lugar para nazis, presa para ti tampoco. Vete ya". Un sector de la hinchada de la entidad de la franja roja acusa a Roman Zozulia de ser neonazi, ideología política asociada al racismo.
El jugador emitía un comunicado oficial en el aclaraba que él no es neonazi, que solo ayuda a su país, Ucrania, que está en guerra. Roman dice haber ayudado a niños ucranianos en medio de esa barbarie.
El director deportivo del Real Betis anunciaba este mediodía en Radio Betis que el jugador volverá a Sevilla. Además, decía el salmantino que Roman Zozulia no podrá jugar con el Betis, al no haber sido inscrito. El futuro del Roman Zozulia es una incógnita. Ahora mismo, solo tiene el apoyo de su club y de sus aficionados, los béticos.
No se sabe qué va a pasar con el delantero ucraniano. Quizás pueda jugar en algún equipo de países en los que el mercado aún sigue abierto, como el de China o el de Japón.