El Real Betis viaja este domingo a Vigo para enfrentarse a un Celta que llegará con resaca europea, ya que habrá disputado la vuelta de los cuartos de final de la Europa League. Un dato relevante, puesto que los celestes llegarán mermados físicamente al encuentro. Sin duda, un factor que los béticos deben aprovechar si quieren llevarse los tres puntos, una semana después de vencer al Éibar en Heliópolis y con varios futbolistas, entre ellos Rubén Castro, recuperado de un proceso vírico.

Pero los focos esta vez no estarán en las potentes delanteras de ambos equipos, donde Iago Aspas y Rubén Castro sobresalen de manera espectacular. Tampoco estarán los focos sobre Dani Ceballos, la clase verdiblanca; o Jozabed, quien se ha hecho un hueco en las alineaciones gallegas, gracias en parte a la disputa de la Europa League. Y es que, el partido tendrá como protagonistas a Sergio Álvarez y Adán, los guardianes de la portería.

Un partido bueno sube a un meta al altar, pero dos fallos en un partido, que incidan en el resultado final, hace descender a ese mismo guardian al más bajo de los sótanos

La mayoría de las veces se habla de un delantero que mete más goles que el otro, o de un magnífico futbolista que regatea como los ángeles y logra desactivar las defensa rivales. Pero en el fútbol, la demarcación de portero es la más importante y la más sacrificada. Un partido bueno sube a un meta al altar, pero dos fallos en un partido que incidan en el resultado final, hace descender a ese mismo guardian al más bajo de los sótanos. Por ello, tanto Antonio como Sergio, serán vitales este domingo en el municipal de Balaídos.

Adán

Antonio Adán nació en Mejorada del Campo (Madrid). Pasó por las categorías inferiores del Real Madrid y en la época de Mourinho en el club blanco, llegó a quitarle el puesto a Iker Casillas. Con la lesión de Iker, el Real Madrid fichó a Diego López y Adán quedó relegado a un segundo plano, por lo que se marchó al Cagliari. En Italia no se sintió cómodo y en el mercado invernal de 2014, llegó al Real Betis.

Su participación dota a los de la palmera con numerosos puntos, siendo protagonista en la mayoría de encuentro debido a la inestabilidad de la defensa bética. Tiene una gran frialdad y unos excelentes reflejos bajo palos. Además, destaca por su altura y corpulencia, algo que le otorga un gran dominio aéreo. A pesar de ello, en ocasiones comete errores de bulto, que le cuestan disgustos a la parroquia del Benito Villamarín, pero son más lo que da, que los quita. Esta temporada ha jugado 31 partidos, encajando 51 goles.

Sergio Álvarez

Sergio Álvarez nació en Catoira (Pontevedra) el 3 de agosto de 1986. Comenzó a destacar a los 17 años, cuando entró a formar parte de las categorías inferiores del Real Club Celta de Vigo. Con la mayoría de edad se asienta como portero del equipo filial vigués, cuajando grandes actuaciones. Tras cuatro temporadas en el Celta B, se marcha cedido al Racing de Ferrol, para volver de nuevo al filial celeste al año siguiente, sin haber tenido una buena temporada en su cesión.

En 2010 da el salto al primer equipo y en la temporada 2014-2015, con la marcha de Yoel al Valencia, se asentó en la portería gallega. Esta temporada ha disputado solo veinte partidos ligueros, ya que en muchos ha descansado por la proximidad de la Copa del Rey o la Europa League, y ha encajado 36 goles