El Betis se jugaba ayer conseguir su tercera victoria consecutiva en Primera, racha que no lograba desde hace un lustro. Sin embargo, el escenario y el rival no era lo más propicio para conseguirlo. A esto, se le sumaba un once plagado de suplentes, donde solo Brasanac, Mandi, Adán y Ceballos, repetían titularidad. Todo apuntaba a que esa ilusión de aumentar la racha de victorias consecutivas, iba a acabar en goleada en contra, ya que el Athletic salió con todo. Pero esto es el Betis, que te sorprende tanto para bien como para mal y el equipo salió muy valiente en San Mamés, ya sean los titulares o suplentes, Víctor ha conseguido mentalizar a los suyos de que queda liga y que hay que competir hasta el final. Muchos jugadores y el técnico madrileño, se juegan la continuidad en el equipo verdiblanco el año que viene, por ello, no pueden pensar en vacaciones ya. Por otro lado, la temporada ha sido un desastre y por motivos económicos, el Betis necesita quedar en lo más alto de la tabla. 

Cejudo fue titular en Bilbao. Foto: Real Betis
Cejudo fue titular en Bilbao. Foto: Real Betis

Confirma las buenas sensaciones

Muy buena fue la imagen de los pupilos de Víctor ante el Éibar y en Vigo, donde se lograron dos victorias de peso. Pese a tener a uno de los mejores locales en frente, no iba a ser diferente y compitió de principio a fin. Algo que parecía impensable con jugadores que tienen muy poco protagonismo como Cejudo, Álex Martínez o José Carlos y otros que han pasado a ser suplentes, como Petros, Jonas o el propio Rubén Castro. La primera parte, aunque los vascos fueron superiores con ocasiones claras, el equipo hispalense no se vino abajo y supo mantener la compostura en todo momento. Fue de menos a más y logró marcharse al descanso con empate a cero, teniendo incluso ocasiones para irse por delante en el marcador. Se percibía un equipo con ganas, pero muchas jugadas en la labor de la construcción del juego se veían frustradas por la falta de calidad técnica en el césped. Tan solo estaba Ceballos para crear juego y es un hecho que en muchas ocasiones perdía el balón por falta de apoyos para llegar a portería contraria.

Un polémico penalti marcó el partido

Comenzaba la segunda mitad y con eso, vino acompañado un inoportuno penalti de Mandi sobre Aduriz. Bastante polémico ya que el jugador argelino puede que toque la pelota. No obstante, el Athletic se adelantó de la única forma con la que pudo batir a Adán, desde los once metros. Acto seguido, llegaría el segundo tanto por medio de Muniaín y comenzarían a aparecer los fantasmas de ese Betis sin alma que se ve goleado en escasos minutos. Sin embargo, los jugadores le iban a dar la razón a Víctor, respecto a la mejoría que hablaba en rueda de prensa e inmediatamante, Rubén Castro iba a recortar distancias en el marcador. La leyenda canaria iba a aprovechar un mal rechace de Kepa Arrizabalaga e iba a marcar su gol número 11 esta temporada. El punta bético, se encuentra a cuatro goles de Poli Rincón para convertirse en el máximo goleador en Primera con la elástica verdiblanca. El cuadro hispalense iba a tener hasta tres ocasiones claras para rascar algo positivo y logró que un equipo tan potente como el Athletic, acabara pidiendo la hora. 

En definitiva, pese a cosechar una nueva derrota, tanto plantilla como cuerpo técnico se han propuesto dignificar el escudo y quedar en la mejor posición posible. Al menos, en las últimas tres jornadas está demostrando una mejor imagen y encontrando la fórmula para estar más cerca de la victoria. Tanto club, como entrenador y plantilla, se juegan mucho en las últimas cuatro jornadas, porque para "ir en chanclas" ya habrá tiempo cuando finalice el campeonato.