A día de hoy, lo que está claro es que Rubén Castro Martín es leyenda viva del beticismo. Tanto es así, que es el máximo goleador de la extensa historia verdiblanca con 147 goles. Además, siete temporadas consecutivas son las que avalan al delantero canario con la elástica de las trece barras, algo que no se veía en el Villamarín desde que Capi se retiró besando el césped del santuario bético. Rubén con un carácter tímido y sin "don de gente", se ha ganado al respetable de al final de la Palmera a base de goles. Sin embargo, tras esta temporada, muchos son los que se replantean la continuidad del punta canario. Un rendimiento más bajo y sus 35 años, hacen que sean dos condiciones de peso para dejar paso a la savia nueva. No obstante, observando una serie de datos, quizá muchos de esos aficionados dubitativos salgan de dudas.
Una leyenda de diario
Antes de profundizar en las estadísticas del delantero bético, hay que reconocer que en cuanto a números, ha sido de las temporadas más flojas. Por otro lado, hay que valorar que esta temporada la falta de identidad en el esquema de Gustavo Poyet, con el canario caído a la banda y posteriormente, el planteamiento defensivo de Víctor Sánchez del Amo, donde su zaga de cinco jugadores era innegociable, se antojaba complicado que la temporada de Rubén Castro fuera especialmente buena. Pese a ello, 13 goles son los que ha anotado en esta campaña, siendo el décimo máximo goleador de la Liga Santander.
Un año complicado para el propio Rubén, donde un tema judicial, cuya resolución se sabrá en poco tiempo y un más que posible bajón de rendimiento, provocó que el jugador no se rindiera y trabajara más. Tanto es así, que en el peor momento de la temporada, tanto en lo colectivo, como en lo personal, el goleador español comenzó a trabajar de manera individual a doble sesión. Haciendo una valoración más subjetiva, cualquier otro jugador que haya demostrado lo que ha demostrado Rubén, podría relajarse. Sin embargo, el canario es consciente de lo que le debe al Betis y viceversa, su profesionalidad nunca estuvo en entredicho y ahora menos que nunca. Para el canario no es suficiente los casi 150 goles anotados, sino demostrar su valía a diario.
La temporada de Rubén Castro
Como se ha destacado anteriormente, es un hecho que el canario no ha estado a un buen nivel, ya que pese a hacer un buen puñado de goles, ha sido muy irregular. E incluso, llegando a vivir su mayor sequía anotadora con el cuadro hispalense. Un minoritario sector, pero cada vez mayor, pide la salida de Rubén con una despedida a su altura. Quizá, el killer bético no ha hecho tan mala temporada como se cree y siga siendo un valor activo del club. En primer lugar, como se ha explicado anteriormente, Rubén está en el Top-10 de máximos goleadores de Primera División, superando a goleadores de la talla de Bakambu, Benzema o Gameiro.
Además, muchos de los béticos que dudan de Rubén, piensan que lleva más goles porque juega más. Sin embargo, este argumento carece de peso, ya que el canario es el jugador de la plantilla que menos minutos necesita para anotar un gol. Su promedio esta temporada ha sido un gol cada 214 minutos. Para hacerse una idea, sus compañeros que le disputan su puesto, quedan lejos del mito heliopolitano. Sanabria anota un tanto cada 373' y Alegría uno cada 478'. Otro dato llamativo, es que Rubén Castro es el futbolista más influyente para su equipo en la máxima categoría del fútbol español, por delante de Cristiano y Messi. Hasta tal punto llega la importancia del máximo goleador histórico que sin sus goles, el Real Betis sería equipo de Segunda División. Atrás quedan hazañas que parecen normales, pero que no dejan de tener valor tanto para Rubén como para el Betis. Convertirse en el único jugador en la historia verdiblanca en ser el "pichichi" del equipo por quinta temporada consecutiva o anotar más de diez goles por campaña con las treces barras, son retos que solo una leyenda de su nivel sería capaz de normalizarlos.
Un conjunto de hechos que demuestran que Rubén Castro vive del presente y no del pasado, cuyo trabajo y compromiso queda demostrado a base de goles cada campaña. Pese a los numerosos años de mediocridad deportiva que prevalece en el club sevillano, está claro que ha surgido un mito del que pocos o ninguno, olvidarán. Porque Rubén se ha ganado el respeto del Villamarín y lograr el único reto que le queda, ser el máximo goleador de Primera con la camiseta del Betis. El isleño se sitúa a dos tantos del mítico Poli Rincón. Si cumple su octavo curso defendiendo las trece barras, que no quepa duda que lo conseguirá. ¿Y tú, sigues dudando del "24"?
Agradecer los datos a @BetisStats y @LaLigaEnDirecto, porque sin ellos, este artículo no sería posible.