Se enfrentaron ayer Real Betis y Alavés. Dos equipos con rachas totalmente opuestas. Por un lado el conjunto andaluz, que tras nueve partidos y haberse enfrentado ya a equipos como Barcelona, Real Madrid y Valencia entre otros se sitúa en la parte alta de la tabla, rozando los puestos europeos. Por otro lado el Alavés sigue sin encontrarse, hundido en puestos de descenso. Aún así el partido estuvo disputado y finalmente se decantó por detalles que analizaremos a continuación:

De Biasi y sus tres centrales

Gianni De Biasi apostó por una línea defensiva formada por tres centrales y dos carrileros largos. Con la intención de estar bien replegado atrás y reducir espacios. Por su parte Setién apostó por jugar con un solo punta. Demasiados centrales para un solo jugador. Esto hizo que se creara una gran superioridad en el centro del campo en favor del Betis, que gozo del control total del esférico, liderado por Guardado. El mexicano, muy activo,  aparecía por cualquier lado, participando en casi todas las jugadas con pases, regates e inclusos disparos a puerta.

Adán y Sanabria

El primero y el último. El que trabaja de cara al equipo y el que lo hace de espalda. El guardameta estuvo excelente, no tuvo excesivo trabajo, pero el que tuvo lo resolvió de manera brillante. Siendo uno de los artífices de que el Betis mantuviera el gol de ventaja desde la primera parte. Un gol que marcó Sanabria. Otra vez Sanabria. El paraguayo le ganó la partida a los tres centrales de De Biasi, sumando así su sexto gol en lo que llevamos de temporada. Lleva cinco partidos consecutivos marcando y se adjudica el título de pichichi del equipo, en detrimento de Sergio León.

Trujillo Suárez

El colegiado influenció en el resultado. Sus decisiones en jugadas clave, pudieron cambiar el rumbo del partido. Con el 1-0 en el marcador, Mandi agarró en el área a Munir impidiéndole así que rematara. Penalti claro que el canario no señaló. Posteriormente señaló un fuera de juego de Munir inexistente, donde el jugador hispano-marroquí se quedó solo ante Adán al que supera con una gran vaselina. Gol legal que no subió al marcador. Pero no siempre perjudicó a los vascos. En la segunda parte Wakaso llegó a tarde y le mete un pisotón a Amat. Hubiese supuesto la segunda amarilla del ghanés y por tanto expulsión. Perdonada esta vez por el colegiado.