El máximo goleador en la historia del club, Rubén Castro Martín, también ha sido muy importante en este 2017 para el conjunto bético. Aunque solo ha vestido medio año la camiseta verdiblanca, tanto la afición como él se han seguido mutuamente, ya que sus caminos se volverán a cruzar en 2018. Una historia de amor que ni siquiera lo escribiría el mejor poeta o la rodaría el mejor director de Hollywood. Su convulsa situación, tanto personal como deportiva, en una temporada en lo colectivo muy mediocre, ha quedado marcada por el apoyo incondicional de su afición.

Sus seis duros meses como bético

Comenzaba el enero de 2017, un año más que Rubén vestiría las trece barras y ya van siete. El jugador con más temporadas consecutivas en el cuadro heliopolitano y siendo referente en la vanguardia sevillana. Posiblemente, la campaña pasada fue la más difícil para Rubén en el plano deportivo. Bajo la dirección de Gustavo Poyet y su cabezonería en la confección del once inicial. El uruguayo arrastraba a Rubén a la banda, perdiendo mucho peligro hacia la portería contraria. Por otro lado, tampoco ayudó la llegada de Víctor Sánchez del Amo. El planteamiento defensivo del madrileño, donde su zaga de cinco jugadores era innegociable, se antojaba complicado para que la temporada de Rubén Castro fuera especialmente buena.

Gol de Rubén en el Camp Nou. Foto: LaLiga
Gol de Rubén en el Camp Nou. Foto: LaLiga

Un año complicado para la leyenda bética al que se le sumaba un tema judicial cuya resolución ha sido satisfactoria para el propio futbolista. No obstante, no le eximió de un notable bajón de rendimiento. La campaña más difícil para él, que cuando más estuvo su nivel en entredicho -siendo máximo goleador del plantel- se dedicó a trabajar a doble sesión en solitario. De esta forma, demostró su eterno compromiso con el club en el que explotó como profesional.

Sus números en 2017

Pese a realizar la temporada más floja con el Real Betis, los números de Rubén Castro no son para nada deficientes. Es cierto que, en 2017, ha llegado a vivir su mayor sequía anotadora con el cuadro hispalense, pero le avalan unos números de verdadero killer. En primer lugar, está en el Top 4 de máximos goleadores nacionales en Primera División, donde hay que destacar que tan solo ha jugado media temporada. Además, la campaña pasada se encontró entre los diez máximos goleadores de la máxima categoría del fútbol español, superando a goleadores de la talla de Bakambu, Benzema o Gameiro.

El futbolista más influyente para su equipo en LaLiga

Por otro lado, el canario fue el jugador de la plantilla que menos minutos necesitó para anotar un gol. Su promedio era de un gol cada 214 minutos. Sus compañeros que le disputaban el puesto quedaron lejos del mito heliopolitano: Sanabria anotaba un tanto cada 373' y Alegría uno cada 478'. Cifras que evidenciaban la importancia de Rubén Castro. Sin embargo, el dato que llama más la atención es que Castro fue el futbolista más influyente para su equipo en la Liga Santander por delante de Cristiano y Messi. Hasta tal punto llega la importancia del máximo goleador histórico que sin sus goles, el Real Betis sería equipo de Segunda División.

Su aventura en China y sus futuros retos

Llegó el mercado veraniego y con una presión espectacular de la prensa hacia el jugador, en cuanto a su juicio por presunta violencia de género, tanto el Betis como el isleño vieron que lo lógico era que saliera del club. De hecho, era una operación brillante para la entidad bética, ya que el Guizhou Hengfeng Zhicheng se hacía cargo de la ficha total de Rubén y tan solo jugaría seis meses. Dos circunstancias que hicieron inevitable la despedida del canario. Sin embargo, nunca fue un adiós sino un hasta luego, puesto a que el día 1 de enero se espera que esté a las órdenes de Quique Setién.

Su etapa en China fue brillante. El insular se ha convertido en uno de los grandes protagonistas del campeonato chino, con siete goles en 12 partidos y una racha que, de haber comenzado a principio de temporada, habría permitido al equipo dirigido por Gregorio Manzano pelear por el título. Su adaptación fue inmejorable, llevando el gol del equipo asiático y haciendo una gran amistad con su compañero, Mario Suárez.

Foto: Guinzhou Zingchen
Gol de Rubén en China. Foto: Guizhou Hengfeng Zhicheng

Ahora, Rubén regresa para quedarse y batir el récord que le falta. Convertirse en el máximo goleador del Real Betis en Primera División, que regenta Poli Rincón con dos tantos más. Rubén nunca ha escondido su deseo de volver, donde él también quiere disfrutar de este campaña como bético. El mito verdiblanco acaba contrato en junio de 2018, pero si disputa una serie de partidos renovaría automáticamente. Un año complicado en lo personal, pero que no le ha servido de excusa para formar parte de los mejores jugadores en la historia del club. Esto no acaba aquí, la leyenda continúa.