Se jugaba en una soleada mañana de domingo un partido importantísimo en La Condomina entre el UCAM Murcia y el Betis Deportivo, equipos que llegaban con necesidad de sumar los tres puntos la mañana de hoy. Por un lado, la necesidad era extrema en el lado visitante, pues a pesar de los refuerzos que han venido extremadamente bien para mejorar la dinámica, el equipo continúa en la quema, intentando salir.

Una victoria le habría bastado hoy para salir de los puestos de promoción del descenso. Por su parte, el UCAM Murcia sabía también de la gran importancia del encuentro, pues en su lucha por colarse en los puestos de ascenso, no le ha ayudado nada el sumar 5 puntos en los cinco últimos partidos. Por ello, era también de vital importancia anotarse una victoria más en el casillero en la mañana de domingo. La Condomina hoy iba a hacer lo posible para ayudar a el equipo universitario a conseguir los tres puntos frente a un Betis Deportivo bien reforzado este mercado.

La inconsistencia defensiva, el gran problema

En una cita y escenario importantes, el nuevo Betis Deportivo debía dar la talla y demostrar que es un equipo que ansia continuar en el Grupo IV de la Segunda División B; para ello, qué mejor ocasión que un rival que está luchando por colarse en los playoffs de ascenso como lo es el UCAM Murcia, que ya contó con experiencia en la división de plata el pasado año. Sin embargo, si algo caracteriza al equipo de José Juan Romero es lo impredecible de su actitud en el campo, más todavía en lo referido a conceptos y fundamentos defensivos. Así, el partido comenzó con una serie de internadas del UCAM Murcia que si bien pudieron acabar en gol, fueron contestadas d la misma manera por el Betis Deportivo en los minutos siguientes, calmando la dinámica local de dominar el partido. Poco duraría esta tranquilidad, pues hacia el minuto 20 el partido "se rompió" y ambos equipos comenzaron a atacar sin hacer uso de sus medios centros para construir el ataque. En esta confusión, el Betis Deportivo acabó siendo el perjudicado tras el gol de Marc en el minuto 22. Nuevamente, una inconsistencia defensiva del Betis Deportivo rompió los esquemas y favoreció al rival para abrir la lata del partido.

Lejos de agachar la cabeza, el Betis Deportivo mostró carácter tras el gol encajado, demostrando que no había ido a La Condomina para irse de vacío. El filial bético continuó su bombardeo a la portería de Javi Jiménez, que tras el gol tendría más trabajo que ningún otro en el UCAM. Los continuos ataques se sucedieron a la portería de los universitarios, que salvaron el resultado en la primera parte gracias al pitido final del colegiado para mandarlos al descanso. La gran dinámica del Betis Deportivo sólo podía indicar que el gol estaba cerca.

Mostró carácter, pero acabó bajando los brazos

Tras los 15 minutos del descanso, ambos conjuntos vlvieron a salir al campo para disputar la segunda parte del encuentro. Sin duda alguna, la charla del descanso hizo poco efecto en los jugadores, puesto que se continuó el panorama visto antes del descanso; un Betis Deportivo ansioso por marcar el gol del empate, que acabó llegando en el minuto 48' por mediación de Aitor Ruibal, que en un mano a mano con Javi Jiménez no perdonó. Tras el gol verdiblanco, volvió a producirse la ausencia del centro del campo de ambos equipos, una situación que ya se dio en el primer gol murciano; en esta ocasión no acabó llegando, gracias a las actuaciones de Tienza. Sin embargo, a pesar del susto, se vio a un UCAM con ganas de llevarse los tres puntos frente a unos béticos que fueron de más a menos en la segunda parte. Así, tras todo el segundo tiempo intentándolo, el anotador del UCAM Marc Fernández acabó por marcar el gol de la victoria en el 84' para dar los tres puntos a su equipo. Nuevamente, bajar los brazos en los minutos finales le costó al Betis Deportivo los 3 puntos; en este caso, el empate.