Encuentro complicado el que se le presentaba al Cádiz CF este sábado, recibiendo en Carranza al líder de la categoría, un Levante que venía dispuesto a sellar el ascenso de categoría llevándose los tres puntos de la Tacita de Plata. Los amarillos querían romper su racha de cuatro encuentros sin ganar, pero finalmente se llevaba su cuarto empate seguido, y además con el mismo marcador que los tres anteriores (1-1). Los de Orriols suman su punto número 74 y acarician más que nunca el ascenso.

El equipo amarillo salía con los regresos a la titularidad de Brian Oliván, Salvi y Álvaro García y la ausencia de Abdullah en la medular, que quedaba con Garrido y José Mari y con Ager Aketxe por delante. Por su lado, el Levante incluía a Rober Pier en el mediocentro ante la baja de Natxo Insa.

El Cádiz hace méritos pero el Levante le viene en contra

Tras los iniciales minutos de tanteo, en los que ninguno de los conjuntos lograba posesiones demasiado largas, el equipo de Álvaro Cervera, algo más cómodo, comenzó a inquietar el marco de Raúl Fernández con algunas opciones por la banda izquierda de Brian Oliván y Álvaro García. No obstante, la primera ocasión llegaba a los doce minutos, con un fantástico pase al hueco de José Mari hacia Salvi, ganando el sanluqueño la espalda de la defensa y plantándose en el área, pero el portero granota se tiró abajo para evitar que el "7" amarillo rematase a placer.

El Cádiz empuja pero es Roger quien ejecuta

Soplaba el viento a favor de los de casa, que en todo caso tenían la difícil tarea de domar un balón endiablado de velocidad, mientras que su oponente debía de darle mayor fuerza ya que, aunque suene paradójico, el levante le frenaba. Aketxe, tras botar tres saques de esquina consecutivos, probaba un disparo desde el vértice izquierdo del área valenciana, que, seco pero centrado, iba al cuerpo de Raúl Fernández. Los andaluces, así, iban a insistir cada vez más entrando por banda, con centros peligrosos que inquietaban a la zaga, mientras que los de Muñiz lo intentaban más a la contra, y de hecho Roger hubiese logrado quedarse solo de no ser por la intervención de Sankaré, rozando ya la media hora de juego.

Pasaban los minutos sin que pasase nada demasiado importante, salvo la lesión de Postigo, que a los 36 minutos era sustituido por Saveljich. Pero a pesar de que todo parecía transcurrir con normalidad, en el 38 de la Fuente Ramos señalaba pena máxima al considerar que Sankaré tocaba el balón con la mano en el área al lanzarse al cortar un pase. Roger transformaba el penalti, poniendo al Levante por delante y anotando su diana número 21 de la temporada. 

Terminaba así la primera mitad, que en realidad venía a ser la historia de siempre. La grada de Carranza, notablemente descontenta, despedía con abucheos la salida de los jueces de la contienda, que nuevamente se hicieron notar. Pero polémicas aparte, el Cádiz, aunque le soplase el viento a favor, el auténtico Levante le venía en contra.

Gran esfuerzo que bien vale el empate

Salían a por todas, y ahora con el viento en contra, los pupilos de Álvaro Cervera tras el intermedio. Los gaditanos volcaban el juego a campo contrario contrarrestando a "los dos levantes", encontrando espacios y haciendo daño con su velocidad. Así, la emoción llegaba pronto, cuando a los 52 de juego Garrido remataba a gol un saque de esquina, pero Pedro López evitaba bajos palos que el esférico entrase.

La ocasión del vasco no era más que el preludio de lo que llegaba. Porque solo seis minutos después, Salvi cogía el rechace del trallazo de José Mari que iba a parar al larguero, y lo aprovechaba batiendo a Raúl estableciendo el empate.

Acoso sin derribo por parte amarilla

Y continuaba el asedio con un remate de Garrido que sacaba el portero, y a los 62 minutos Ortuño perdonaba un pase de la muerte de Salvi con todo a favor en el segundo palo, merced a una providencial intervención de Saveljich. La reacción de los de Orriols llegaba cinco minutos después, con un disparo frontal de Víctor Casadesús que se iba cerca del palo derecho de la meta de Cifuentes. Más tarde, Garrido volvía a encontrarse un balón suelto en el área tras el saque de una falta, pero la defensa salvaba los muebles junto al palo izquierdo. Morales respondía para los de Muñiz a los 77 minutos con un golpeo desde la frontal que despejaba Cifuentes en una gran estirada.

El encuentro transcurría bien para el Cádiz, pero el segundo gol, aunque se buscaba, no terminaba de llegar. Por ello, Cervera veía la ocasión de dar entrada a Nico Hidalgo y Aitor García por Brian Oliván y Salvi a siete minutos del final. Cambios ofensivos con los que el equipo local, espoleado por su hinchada, quería dar ese paso necesario para llevarse los dos puntos que le faltaban. En esas, Raúl Fernández se quitaba de encima como podía un golpeo duro de Aketxe de falta directa y Aitor García sacaba su fusil tras dibujar una buena diagonal hacia el centro, pero su disparo salía alto.

El tiempo se agotaba y el conjunto cadista comenzaba a atacar con más corazón que cabeza, cometiendo imprecisiones a la hora de conducir sus ofensivas, como en una contraataque ya en el descuento, y en el que Aitor García no lograba entenderse ni con Ortuño ni con Nico Hidalgo y regalaba la posesión a un rival que llevaba minutos dando por bueno el reparto de puntos.

Concluía así la contienda con un empate a golpes, que no premia a un Cádiz voluntarioso pero que, siendo fallón, se mereció algo más, y que deja al Levante a solo un paso de cantar su merecido ascenso. La visita del Real Oviedo al Ciutat de Valencia, esta vez, podría ser definitiva.