Después de la gesta que se vivió en Balaídos el pasado miércoles al eliminar al Real Madrid en los cuartos de final de la Copa del Rey y conseguir a su vez el pase a la semifinal, en la que se enfrentará al Alavés, al Celta de Vigo le toca volver al competición regular. El sábado a las 20:45 comienza la segunda vuelta para el equipo olívico. Se enfrentará al CD Leganés, que debutó en Primera División ganando por 0-1 en el feudo celtista en la primera jornada de Liga. Por eso, hoy vamos a conocer un poco más a una de las figuras del modesto club pepinero: el atacante Guerrero.

Miguel Ángel Guerrero nació el 12 de julio de 1990 en Borox, un pueblo de poco más de 3000 habitantes situado en la provincia de Toledo. El punta se formó en las categorías inferiores del Albacete, y en la temporada 2011/12 decidió emprender una nueva aventura fichando por el filial del Real Sporting de Gijón. En la siguiente campaña, combinó partidos con el filial y el primer equipo, llegando a marcar 2 goles en 17 partidos en Segunda División con este último. En la temporada del ascenso del conjunto asturiano a la máxima categoría del fútbol español, el toledano incrementó notablemente su cifra de goles al jugar más partidos: 11 goles en 36 encuentros.

La temporada pasada, gozó de menos protagonismo y pese a salvar la categoría en la última jornada contra el Villarreal, Guerrero decidió marcharse a un recién ascendido para disfrutar de más minutos. Aceptó la oferta del Leganés e hizo las maletas para enrolarse en las filas del cuadro pepinero. De momento, lleva más goles que la pasada temporada y es el máximo goleador del equipo con 3 tantos en 13 partidos, el último de ellos conseguido en el empate a 2 en Mendizorroza ante el Alavés.

En Butarque, esperan que Guerrero está con la caña a punto para pescar tres puntos importantes contra el Celta que le podrían permitir colocarse en la 15ª posición y alejarse un poco más de los puestos de descenso.