Con la sensación de haber realizado un buen trabajo el pasado fin de semana, Carlos Caballero compareció ante los medios de comunicación. “Hemos ganado el primer partido del año, cosa que en los años que llevó aquí no se había conseguido”, compartió el centrocampista.

A pesar del triunfo, la grada no quedó satisfecha con el juego ofrecido por sus jugadores. Algo que no escapa a los propios futbolistas, ya que así también lo reconoció el madrileño: “El equipo no hizo un fútbol brillante”; si bien destacó la “solidez” mostrada por los blanquiverdes que derivó en un plácido resultado a favor.

Igualdad extrema

La Liga Adelante destaca por encima de cualquier otra por la escasa diferencia entre el primer y último clasificado, haciendo que una victoria o una derrota cambie la tabla clasificatoria. Esta igualdad no es extraña para los principales protagonistas. “Te puede ganar cualquiera”, alegó Caballero.

El próximo rival liguero, el Mallorca, se encuentra con los mismos puntos a estas alturas de temporada y tan solo un puesto por debajo en la clasificación. Los bermellones pondrán a prueba la nefasta racha como visitante de los blanquiverdes (una sola victoria). La necesidad de victoria es un hecho, algo que no escapa para el “21” cordobesista: “Esta semana tenemos más ganas de ganar que nunca. Es un rival directo, lo que hace que sea un partido ilusionante”.

Arturo, aclimatado

El primer fichaje albiverde en el mercado invernal, Arturo Rodríguez Pérez-Reverte, cuajó un interesante ante el Recreativo de Huelva. Movilidad y gol fueron los resultados. Cuestionado sobre su adaptación al vestuario, Caballero confesó que “se ha acoplado muy bien”. De él, valoró su “humildad” y “predisposición al trabajo”.

Aportación al equipo

Nadie duda de la calidad del centrocampista madrileño. No obstante, en los últimos partidos se ha visto a un Caballero más desdibujado y algo fatigado, lo que ha derivado en que Pablo Villa no dudara en sentarlo al banquillo. A pesar de ello, la calidad del medio aboga a que el técnico no pueda prescindir de él. Por ello, el pivote reconoció que en las últimas semanas había jugado “lastrado físicamente”, siendo indiferente “la posición” en la que el entrenador le ubique, ya que “lo que quiero es jugar”, concluyó.