Se acerca el final, los últimos compases de esta intensa e igualada competición. El domingo se disputará a horario unificado la penúltima jornada liguera. Uno de los encuentros más llamativos del día es el Mallorca - Córdoba. Dos equipos con mucha historia, tanto en Primera como en Segunda aunque el Mallorca ha tenido la oportunidad de disfrutar más veces de la máxima competición. El Mallorca se encuentra en una situación delicada en la actualidad. Aquel equipo que llegaba tan lejos en Liga y en Copa del Rey, un equipo siempre combativo con estrellas de la talla de Arango, Samuel Eto´o, Pandiani o Ibagaza, descendió hace tres temporadas a Segunda División. Destrozado económicamente, como a muchos clubes que descienden, le costó mantener la categoría el primer año. Y con el paso de estos dos años, pese al intento de cambiar de objetivo, siempre se enfrenta a la realidad y disputa por no descender. 

Ahora, una vez tienen casi hecha la salvación, con la llegada de capital estadounidense de la mano del dueño de los Phoenix Suns de la NBA, Robert Sarver, y del ilustre jugador norteamericano Steve Nash a la dirección deportiva, el club intentará cambiar de rumbo hacia metas más ambiciosas. 

Equipo 

El Mallorca está dirigido por Fernando Vázquez, entrenador que fue capaz de subir al Deportivo de la Coruña a Primera. En los últimos partidos ha combinado dos sistemas, el 4-4-2 y el 4-2-3-1 en función del número de delanteros que utilice. En la portería no hay dudas, el meta es Wellenreuther. El alemán cedido por el Schalke 04 se ha mostrado muy seguro durante toda la temporada pero el domingo no podrá estar frente al Córdoba y le tocará a Cabrero defender la portería.

La defensa es una de las líneas que sufre más variaciones. La más repetida ha sido la compuesta por Campabadal, Aveldaño, Yuste y Oriol. No obstante, el lateral Company ha disputado varios partidos en ambos costados, como por ejemplo el último ante el Elche. Otro jugador que disputó el último encuentro fue el central Truyols en sustitución de Yuste, que en oncasiones hace las veces de centrocampista. El doble pivote cuenta con un todoterreno como Sissoko, incombustible. Su acompañante suele ser el joven Damiá Sabater pero ya se ha comentado que Yuste puede adelantar su posición. Son dos o tres jugadores que se reparten todos los minutos al no tener sustitutos de garantías.

Los costados, arma fundamental para Vázquez, pertenecen a Salomao y Pereira aunque la presencia de Lago Junior por todo el frente de ataque hace varias mucho estas posiciones. Junto a ellos también es habitual Arana. Menos utilizados son Brandon y el goleador de la pasada jornada Pol Roigé. Por último, el puesto de punta pertenece a Ortuño, llegado en el mercado de invierno junto a Óscar Díaz, jugador que ha compartido muchas veces la punta de ataque en el 4-4-2. Aunque tampoco nos podemos olvidar de Javi Acuña. El paraguayo no es titular pero es un recurso muy utilizado en las segundas partes.

Estilo de juego

El Mallorca es un equipo que no rechaza el balón, no regala la posesión al equipo rival. Con el nuevo entrenador, se trata de un equipo combativo y peligroso aunque no destaca mucho línea por línea. Precisamente por ello tuvo que recurrir de urgencia en el mercado invernal. La defensa es uno de sus principales puntos débiles al no contar con jugadores de gran peso y de gran nivel para la categoría. Son de un nivel medio. Los laterales son ofensivos, les gusta incorporarse y suelen dejar espacios para los bandas rivales. En el medio Sissoko barre todo, abarca mucho campo y es Damiá el encargado de manejar el juego pese a su juventud. 

Tiene bastantes problemas para la salida de balón cuando se encuentra con una presión alta del rival. Sin embargo, si el rival de agazapa atrás en su propio campo, el Mallorca es capaz de combinar y avasallar hasta marcar. Por eso, en el papel del Córdoba, es fundamental no dejar tocar cómodo al rival y presionar constantemente. La diferencia de este equipo se encuentra en los flancos, pues posee a jugadores que deberían optar por el ascenso o jugar en Primera. Tanto Pereira, Salomao como Lago Junior ponen la punta de velocidad y el desborde. Cuando combinan es difícil pararlos, para ello será fundamental la red montada por el Córdoba con Luso, Markovic o Caballero junto a los centrales. Quizás los centrales deberán prestar más atención a Ortuño. Se trata de un jugador alto, espigado, buen rematador y corpulento. No es el tipo de delantero torpe y nada hábil con el balón sino que le gusta jugar y recibir a la espalda y al espacio. El Mallorca potencia a este jugador con centros laterales tanto de los bandas como de los defensas laterales.

En definitiva, será un equipo rocoso, difícil, motivado por asegurar la permanencia y que tratará de sacar de la lucha por el ascenso a los cordobesistas.