La mañana del domingo deparaba un partido apasionante entre Dépor y Celta que se jugaban el primer derbi del campeonato en Balaídos. El Celta goleó a un Deportivo que sale muy tocado anímicamente del encuentro en donde los hombres de Garitano demostraron una vez más las dificultades que tienen de cara al gol y lo caro que están pagando los errores defensivos. El conjunto blanquiazul no acaba de reflejar el rendimiento que se le espera y necesita un cambio de rumbo para salir de las posiciones bajas de la tabla.

Garitano hizo una declaración de intenciones con el once inicial que se confirmó al empezar el partido. El Dépor entregó la posesión al Celta desde el minuto uno y esperaba en su área la oportunidad a la contra. El conjunto celeste empezó ligeramente mejor el encuentro pero no estaba generando mucho peligro, hasta que en el minuto 12, Germán Lux realizaba un paradón tras un cabezazo de Wass a centro de Hugo Mallo.

El Dépor estaba teniendo muchas dificultades para salir con el balón jugado y crear peligro sin ser en acciones a balón parado. El partido empezaba a calentarse y la tensión subía por momentos cuando en el minuto 32 Orellana se internaba en el área encarando a Fernando Navarro y filtraba un balón para Hugo Mallo que soltó un latigazo para abrir la lata y poner el 1-0 en el marcador para los celestes.

Pocos minutos más tarde, Bruno Gama recibía una falta lateral en el minuto 37 para que Fayçal colgase el balón al área y Albentosa cabecease para marcar un golazo que ponía el empate en el electrónico. Llegó el descanso en un mal momento para el Dépor, que tras el gol se vino arriba y gozó de sus mejores minutos de la primera parte, estando a punto de marcar el 2-1 en un centro al que no llegaron ni Florin ni Guilherme para empujar el balón.

Se reanudaba la segunda parte y los hombres de Garitano seguían buscando hacer el segundo a balón parado, pero el Celta con la posesión se fue acercando poco a poco a la portería blanquiazul y en el minuto 58, Wass remató un centro desde la banda y el árbitro señaló penalti por mano de Sidnei. Iago Aspas anotó el penalti y puso el 2-1 en el marcador que volvía a adelantar al Celta.

Tras el gol del conjunto vigués, se vieron los mejores minutos del Dépor que se volcó en ataque buscando el empate. El Dépor arriesgó y el Celta supo leer el partido aprovechando los huecos de la defensa blanquiazul para sentenciar el partido haciendo mucho daño a la contra. En el minuto 77, Jonny se recorría todo el campo para llegar casi hasta línea de fondo y servir en bandeja un centro a Orellana que entró por el segundo palo para hacer el 3-1 en el marcador.

Cinco minutos más tarde, Iago Aspas le ganaba la carrera a los centrales blanquiazules en otra contra y se plantaba en el área rival para definir y hacer el definitivo 4-1 que daba la victoria al Celta en el derbi. El Dépor salió cabizbajo de Balaídos después de sufrir una goleada muy abultada y dolorosa contra el máximo rival.