Gaizka Garitano acudió a la rueda de prensa del día previo al partido de esta jornada, tras dirigir la última sesión preparatoria antes del viaje del equipo a Bilbao.

Tras ser preguntado por las ausencias de algunos futbolistas en la convocatoria, el entrenador herculino rechazó cualquier idea malintencionada: "No puedo llevar más y siempre queda alguno fuera, no es nada personal". Dos de los fichajes de invierno que viajan con el equipo son Ola Jonh y Kakuta. Garitano tuvo unas palabras respecto a los dos: "Ninguno de los dos están para 90 minutos, pero sí para jugar", alegando que cualquiera puede disponer de minutos, o ambos.

Cabe destacar la inclusión de Fajr en la lista de convocados después de su vuelta tras la Copa de África. Gaizka explicó sus posibilidades para el partido frente al Athletic: "Si juega Emre, no juega Fajr. Si juega, lo podemos meter atrás, pero perdemos empaque", aclarando una de las dudas que la afición blanquiazul tenía sobre el marroquí, pidiendo en numerosas ocasiones su alineación en la medular.

"Solo han perdido contra el Barcelona, son muy fuertes en casa"

Sobre el enfrentamiento de esta jornada, no dudó de calificarlo como duro, sabe que el Deportivo deberá defender muy bien en San Mamés para sacar algo del feudo rojiblanco: "En su estadio se hacen muy fuertes y el partido se hace largo. Tienen futbolistas determinantes y son muy fuertes en el área rival. También tienen rachas de 15 o 20 minutos muy fuertes, en las que te meten debajo de la portería". Aún así no se muestra pesimista y cree en las opciones de su equipo de llevarse el partido: "Confiamos en nuestras posibilidades y vamos a ir con ganas de conseguir algo bueno". Para ello dio unas claves para conseguir realizar un buen encuentro mañana: "Muchas veces hemos estado haciendo las cosas bien, cerca de ganar. No se necesita una revolución o hacer inventos, sé lo que vamos a hacer pero normalmente el haber estado cerca de ganar o de dar buena sensación no nos tiene que cegar, hay que entrar bien en los partidos", admitiendo que en los últimos dos lejos de Riazor, sus hombres saltaron al campo con cierto miedo, sin ser contundentes.

Por último quiso hacer una breve reflexión en torno a las críticas que haya podido recibir el equipo por su juego y resultados, especialmente jugando fuera de casa: "Este es un club grande, eso me anima a trabajar cada día más, exigirnos más, la altura cada día tiene que ser mayor, no puede ser una excusa, ni una queja" comentó, tras indicar previamente que "el que viene aquí, sabe a lo que viene, esa presión nos hace crecer, no es excusa".