El delantero rumano del Deportivo de La Coruña concedió una revista a AS en uno de los momentos más complicados desde su llegada al club gallego. El ‘10’ blanquiazul rechazó importantes ofertas este verano para convertirse en un jugador fundamental en el club gallego, pero la llegada de Lucas lo ha desbancado a un segundo plano.

Tras la vuelta a Coruña tras el parón de selecciones, el jugador declara sentirse “físicamente bien, jugué los dos partidos de suplentes y no tengo muchos minutos encima.” Aseguró estar “mentalizado para el partido del Málaga, que es muy importante”. La selección rumana no ha sido capaz de clasificarse para Rusia 2018 y el jugador confiesa que “es una competición muy bonita de jugar. Estaré triste porque luchamos mucho y era la ilusión de un país”.

El protagonismo que tenía la temporada pasada en el Dépor, lo que le permitió ser pichichi del equipo, lo ha perdido con la llegada de otros jugadores más importantes. Sobre ello dijo: “No estoy entrando en los planes del técnico, he jugado apenas 30 minutos en tres partidos. Estoy con ganas de aportar si me necesita”. El jugador blanquiazul sabe que “toca trabajar y esperar la oportunidad”.

Andone está viviendo una situación a la que no se encuentra acostumbrado. “Es un momento dificil, llevo cuatro o cinco campañas jugandolo casi todo. Juego poco y muchos partidos en el banquillo, es una situación incómoda. Después de lo que se habló conmigo en verano, tenía esperanzas de hacer un buen año”. 

Sobre su continuidad en coruña también habló. El delantero afirma haber tenido “ofertas muy grandes para mí y nunca me quise ir. Quería jugar y sentirme importante. Me daban el doble y me quede aquí”.

El mercado invernal se encuentre próximo, y sobre ello se le preguntó al rumano, quien respondió que: “Replantea muchas cosas, pero no vale ser negativo y llorar. No se si este mes y medio será clave o no, lo que quiero es jugar. Hay equipos que me están llamando”.

Respecto a su edad y el trabajo que hizo la pasada campaña, Florín aseguró no estar preparado para pasar toda una temporada en el banquillo con 24 años:” Quizás con 33 sí, pero no con 24. Mi idea es ganarme un sitio en el equipo, ser titular y ayudar.  No digo que sea mejor que nadie, pero no voy a estar un año entero de suplente”.

El jugador ha afirmado que intenta aislarse “pero los días de partido casi no puedo, me dan ganas de llorar”. Sobre la confianza aseguró jugar con “presión añadida. Estoy sin jugar, soy titular y empatamos a cero y luego estoy cuatro o cinco partidos sin jugar. Es como si la culpa fuese mía. Intentó aprovechar los minutos pero cuando juegas 15, es complicado”.

Sobre la posibilidad de jugar en banda, el blanquiazul aseguró no estar cerrado pero “no prometo hacerlo bien porque no he jugado nunca en otro sitio”.