Como bien redactó Espronceda, viento en popa a toda vela, con once jugones en la cancha, sigue avanzando la SD Eibar de José Luis Mendilibar, que ha logrado cosechar en El Molinón la que ha sido su tercera victoria consecutiva, una racha que sin duda, van a buscar alargar en San Mamés. Ahora mismo, los armeros se sienten con muchísima confianza, han encontrado la estabilidad con su nuevo sistema y las cosas están saliendo a pedir de boca, y de hecho, se está viendo reflejado en la tabla, donde se encuentran clasificados en la séptima plaza, luchando por adjudicarse una de las plazas que otorgan acceso a la UEFA Europa League.

La visita a San Mamés, una de las más difíciles del año, no podría llegar en mejor momento, tras tres grandes triunfos ante Celta, Betis y Sporting. Con Sergi Enrich ejerciendo de Borja Bastón, Escalante, Dani García y Jota Peleteiro vaciándose en cada despliegue físico que realizan en los partidos, y con la magistral técnica de un Pedro León que siempre acaba sorprendiendo a Ipurua, todo parece dispuesto para asaltar a un Athletic que llega dolido y con una importante baja. Aritz Aduriz fue expulsado en el estadio de Gran Canaria.

Eso sí, a pesar del buen momento de forma que atraviesa el equipo, hay que recordar que el que se visita es uno de los feudos más difíciles de la categoría. Además, como visitante, no han acabado de salirle bien las cosas a los de Mendilibar, que encadenaban cuatro visitas sin vencer. De hecho, no ganaban lejos de su estadio desde la tercera jornada, cuando vencieron en el Nuevo Los Cármenes, justamente, la única victoria a domicilio del presente curso, hasta la obtenida en Copa ante el Sporting, un resultado, que incrementará más aún la inercia de un Eibar que venía lanzado ya, y que ahora, se ve moralmente reforzado al comprobarse que sus suplentes también saben ganar partidos.