Jorge Sampaoli aterrizó en tierras andaluzas el pasado verano y afronta su primera temporada con el Sevilla FC. Lo está haciendo de maravilla. El club hispalense es 3º en la clasificación con 46 puntos, 2 menos que el FC Barcelona - segundo en la tabla - y 3 menos que el Real Madrid, líder a pesar de haber disputado 2 partidos menos. También sigue vivo en Liga de Campeones y jugará la semana que viene contra el Leicester el encuentro de ida correspondiente a los octavos de final. 

Fútbol camaleónico y ofensivo. Este es el estilo de juego que caracteriza a los equipos de Jorge Sampaoli, y el Sevilla no es una excepción. El entrenador argentino es un gran devoto de la táctica del juego en sí y se muestra valiente, atrevido y con carácter, intentando siempre que sus equipos hagan un gran presión para dificultar la salida de balón del rival, algo que tiene en común con el propio Eibar. Le gusta, además, tener el balón y atacar con él.

El técnico no tiene un sistema de juego predeterminado, puede ir modificando el esquema de juego en un partido dependiendo de lo que sea necesario en ese momento y ha comenzado los partidos ligueros con muchas variaciones a lo largo de la temporada. Sin ir más lejos, contra el Las Palmas el Sevilla salió al terreno de juego con un  4-3-2-1, pero no así contra el Villarreal una jornada atrás, donde salió con un 4-4-2. Hace tres jornadas, en Cornellá-El Prat, Sampaoli se decantó por un 4-1-3-2 y venció a Osasuna en el Sadar hace cuatro jornadas con un 5-3-2 más suyo. El Sevilla es un equipo que cambia de esquema continuamente, adaptándose a las necesidades de cada partido, tanto de inicio como a lo largo de los 90' minutos.

Sampaoli comenzó su trayectoria como entrenador en 1994, pero no debutó en Primera División hasta 2002, entrenando al Juan Aurich de Perú. Un trotamundos del mundo del fútbol, el argentino paso por varios equipos peruanos, chilenos y ecuatorianos antes de fichar por la selección nacional de Chile, lo que supuso su salto a la élite del fútbol internacional. Entrenó al combinado nacional durante 4 años, tiempo en el que logró el mayor hito de su historia. Chile se proclamó campeón de la Copa América 2015 de la que fue anfitrión por 1ª vez en su historia. También clasificó al equipo para la Copa Mundial 2014, donde eliminado a España primero (2-0) en la fase de grupos, pero cayó posteriormente contra Brasil en la tanda de penaltis de los octavos de final.