Ha acabado ya la temporada para el primer equipo de la SD Eibar, que ha logrado una gesta histórica quedando en la zona noble de la tabla. Sin embargo, queda trabajo aún por hacer en otras secciones, y es que el fútbol todavía no ha acabado para el combinado armero. Tampoco para Ipurúa. Y es que hoy, sábado 27 de mayo, se disputa un encuentro que puede ser histórico en el feudo eibarrés. El filial, el CD Vitoria, jugará la vuelta de los Playoffs de ascenso a Segunda B -mientras que el femenino jugará el domingo-, frente al CD Azuaga de Badajoz, tras un empate sin goles en Extremadura. Y de cara al partido, el entrenador del Vitoria, Arkaitz Lakanbra, compareció ante los medios.

Empezó confirmando lo que se esperaba.  Y es que uno de sus jugadores, Jon Irazabal, "lleva varios partidos sin jugar y no estará". Sin embargo, confirmó el retorno de uno de sus defensas, al afirmar que "Julen López se encuentra a tope". Sobre el resultado en la ida, es consciente de que "fue bueno, pero al mismo tiempo peligroso". Y es que al empatar sin goles, "si ellos se adelantan en el marcador nos obligan a convertir dos goles". Sobre su rival, afirma tener delante un contrincante que tanto él como sus jugadores "habíamos visto". Los elogió afirmando que "son un equipo con mucho poderío ofensivo, interesantes en el tercio superior del campo".

Sobre jugar en el verde de Ipurúa, no pudo mostrarse más contento. Aseguró que ese hecho supone "un plus a todos los niveles, mientras que al nivel de ilusión y motivación el grupo está muy fuerte". Atribuyó el que se jugara en el estadio del primer equipo que "todos hemos decidido jugar en este escenario y esas ganas nos darán un valor añadido para encarar la eliminatoria". Concluyó declarando que espera tener "más partidos además del de este sábado".