Thievy Bifouma fue otro de los grandes salvadores del Espanyol en Balaídos junto a Kiko Casilla. Suyo fue el gol que igualó el electrónico y que incluso pudo hacer que su equipo optara a la victoria. El francés que también jugó ayer de blanquiazul ante el Vilassar en la celebración del centenario del club del Maresme, se limitó a decir sobre el amistoso de anoche que fue ''un entrenamiento más que otra cosa''.

''Sergio García es mi referente''

En relación al partido contra el Celta, el jugador declaró estar ''contento'' por el resultado. ''Era un partido complicado y estoy muy contento por el punto conseguido. Además mi pierna respondió muy bien, no noto dolor aunque tengo un hematoma del que me quitaron líquido justo antes del partido''. Thievy no quiso hablar en demasía de su gol en Balaídos, ya que según el jugador galo ''solo es un gol''.

''No me he marcado un número de goles''

Por otra parte, el exjugador de Las Palmas sí que afirmó sentirse bien con el rol que le ha otorgado Javier Aguirre. ''Me siento muy cómodo y con mucha libertad arriba'', en relación a su posición, el joven futbolista nombró a Sergio García como su referente. ''Procuro ir mejorando y aprendiendo, Sergio García es mi referente. Aunque como goleador no tengo ninguna cifra de tantos en mente, solo mejorar día a día''.

Empate rancio ante un rival inferior

El Espanyol empató a cero ante un Vilassar de Segunda División B muy inferior. El encuentro aconteció como el último de preparación para la disciplina perica. No solo para Thievy fue ''un entrenamiento'', el propio Aguirre asumió el amistoso como una mera sesión de entrenamiento y dio oportunidades a algunos jugadores que, si no hay sorpresas, no tendrán muchos minutos.

Aunque la superioridad no se vio reflejada en el marcador, el Espanyol fue amo y señor del partido. El esquema del equipo del Maresme fue claro, encerrarse atrás con las líneas juntas para evitar ataques del rival. Las mejores opciones del partido las tuvo Capdevila en un remate, y Lanzarote en un disparo que se fue lamiendo el palo izquierdo. Aunque, precisamente el jugador que sustituyó a Thievy, Mamadou, tuvo en sus botas el tanto de la victoria al cruzar demasiado un disparo. Los locales solo crearon peligro en los últimos minutos del encuentro.