Empate a dos goles en el primer partido de la temporada en casa del nuevo proyector del RCD Espanyol, que sigue sin conocer la victoria tras la segunda jornada de liga. El Málaga, por su parte, consigue el segundo empate consecutivo. Los blanquiazules llegaron a ganar 2-0 el partido en el minuto 60 gracias al doblete de Gerard Moreno. Pero primero Llorente, en el 67, y después Charles en el 90, firmaron el definitivo empate a dos.

El Espanyol puso el juego, el Málaga la defensa

El partido comenzó como se esperaba, con un RCD Espanyol que salió al ataque y a dominar el partido y con un Málaga del estilo del entrenador, a esperar atrás, bien cerrados y aprovechar algún contraataque para tener su oportunidad. De esta manera llegaron las ocasiones de la primera parte. Las más claras por parte de los locales, mientras que los visitantes no llegaron a inquietar a Roberto puesto que solo finalizaban jugadas con chutes que se marchaban muy desviados de la portería.

Diferente historia es la de los blanquiazules en la primera mitad. Tanto Piatti por banda izquierda, como la pareja Javi López y Hernán Pérez por la derecha, volvían loca a la defensa del Málaga. La movilidad de Gerard Moreno y Baptistao creaba lío entre los centrales y en una de estas, Gerard consiguió, tras jugada individual, el primer gol del partido. Cogió el balón en banda derecha, hizo la diagonal hasta el borde del área donde se sacó un disparo con pierna izquierda imposible para Kameni.

Poco después se le anularía un gol a Álvaro por fuera de juego en el lanzamiento de una falta. A partir de este tanto anulado, el Málaga reaccionó e intentó salir de su campo, sin llegar a generar peligro. Así se llegó al descanso, con la sensación de comodidad para el Espanyol y con el Málaga pensando que todavía era posible puntuar en Cornellà.

De la tranquilidad a la locura

La segunda parte no empezó muy diferente a lo que fue la primera: con un Espanyol intentando dominar un encuentro que ni mucho menos estaba cerrado y con el conjunto de Juande Ramos intentando salir de su campo en busca de un premio, el empate, que no merecían. Miguel Torres substituyó a Ricca, superado en todo momento por Hernán Pérez, y más tarde Charles haría lo propio por  Recio.

Pero no sería suficiente. Jugada similar al gol anulado a Álvaro. Una falta lateral que lanza Piatti, la cabecea Gerard Moreno y Kameni, pese a la estirada, no consigue llegar. Gerard hacía su doblete particular y ponía el 2-0 en el marcador, casi sentenciando el partido. Tras el gol, llegó la mala noticia para los de Quique Sánchez Flores en forma de lesión. Baptistao tenía que dejar el partido tras una patada de Miguel Torres en su tobillo izquierdo. Entraba por él Caicedo.

Y lo que parecía una utopía, se hizo real. El Málaga, en la primera ocasión clara del partido hacía el 2-1. El central Diego Llorente, uno de los pocos que mantenía al Málaga con vida, remataba una falta lanzada desde la banda izquierda y enviaba el balón al fondo de la portería a la vez que daba alas a los suyos. Quique Sánchez Flores reaccionó dando entrada a Reyes por Hernán Pérez, totalmente agotado.

El gol despertó al Málaga y encerró al Espanyol en su campo, pero fue solo un espejismo. Los locales salieron y el partido estuvo unos minutos , hasta la recta final, sin un dueño claro del partido. Tan solo el Espanyol, tímidamente, buscaba el cuarto gol del partido, el tercero que les diera la tranquilidad. Sandro Ramírez trajo los nervios a la grada, pero no consiguió hacerse con el control del balón dentro del área y llegó a las manos de Roberto, cuando quedaban apenas cinco minutos.

Charles primero avisó, luego empató

Más tarde Charles, tras jugada individual, tuvo una gran ocasión que Roberto despejó a córner. El Málaga estaba lanzado al ataque y el empate empezaba a ser posible. En ese momento se marchaba el canterano, que hacía su debut, Marc Roca para dejar su puesto a Diop, que intentaría dar más contundencia al centro del campo. Y lo que parecía que no iba a llegar, llegó. Charles aprovecho una gran asistencia en largo de Llorente, que peinó Camacho, para cruzarle el balón a Roberto y poner el empate a 2 en el marcador cuando se entraba en el tiempo de descuento.

Así se llegó al final del partido. Con una falta lanzada por Reyes que no pudo ser rematada a gol y terminó el encuentro. El Málaga no se rindió pese al 2-0 en contra y consiguió empatarle el partido a un Espanyol que se olvidó de cerrarlo. Empate que sabe a mucho para el Málaga y a poco al Espanyol, que volvió a fallar en los mismos puntos que ante el Sevilla.